No salió bien. Pudo haber salido, porque se hicieron cosas para un buen final, pero, aunque, en líneas generales, el Sporting hizo un buen partido, algunas pérdidas de balón por poca consistencia o frivolidades permitieron al Espanyol ocasiones de gol. Un acierto les bastó a ... los 'pericos' para adelantarse con una ventaja mínima en la eliminatoria. Queda Cornellá, donde la única posibilidad de que salga bien es ganar por dos goles de diferencia.

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Esta vez, Ramírez hizo una alineación racional, con una defensa férrea y un centro del campo más equilibrado. Enfrente tenía un equipo con una buena armadura, hecho para haber subido directo, pero en esta Segunda no hay nada fácil. Roque Mesa aportó dinamismo al juego gijonés y Hassan empezó espectacular. Hubo ocasiones para haber marcado, pero la tensión también provoca precipitación.

El Sporting y el Espanyol afrontaron el partido con una alta dosis de tensión, con un ambiente excepcional. El conjunto catalán enseñó una mejor técnica y aplomo, pero los rojiblancos tuvieron más intensidad. Faltó acierto en las ocasiones claras que tuvo. Y sobró confianza en posibles faltas, como la que le hicieron a Villalba, con un árbitro que dejó jugar demasiado.

Queda ilusión en un milagro en Cornellá.

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