![Aciertos, errores,ruido de tractores](https://s3.ppllstatics.com/elcomercio/www/multimedia/2024/02/09/lepoldo-tolivar-opi-tractores.jpg)
![Aciertos, errores,ruido de tractores](https://s3.ppllstatics.com/elcomercio/www/multimedia/2024/02/09/lepoldo-tolivar-opi-tractores.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
Como saben las personas más allegadas a mí, no disfruto escribiendo de temas jurídicos; ni siquiera cuando se anudan a la política diaria. Bastante tengo con llevar décadas viviendo del estudio y enseñanza del Derecho como para deleitarme con escritos leguleyos los fines de semana. ... Pero entiendo que los directores para los que vengo aportando artículos en este diario decano, quieran que opine sobre lo que es mi profesión; igual que, si tienes a mano un fontanero, le encargas que te desatasque el inodoro. Y perdón por la comparación tan prosaica, pero la jurisprudencia, aunque utilísima e imprescindible en la sociedad, es muchas veces soporífera y, para colmo, sofista al máximo. Cuántas veces lo que hoy se defiende, mañana se rebate. Y no sólo hablo de abogados y jueces. También de altos funcionarios y autoridades, como estamos viendo con las declaraciones mutantes sobre la constitucionalidad de una ley de amnistía. Pero no voy a eso y me resigno a opinar sobre la reforma, contrarreforma y vuelta a reformar del organigrama autonómico y otros asuntos de actualidad.
Pueden lapidarme si lo desean, pero creo que el presidente Barbón ha hecho lo correcto y lo que únicamente a él le compete, sin perjuicio de escuchar opiniones de todo signo. Comienzo diciendo que fue un error, que ahora ya se rectifica, privar a la Cultura, sola o acompañada, de un órgano con denominación o rango de Consejería. Incluso esta asunción -casi avocación- del presidente con respecto a la materia cultural presentaba problemas de legalidad: varias leyes autonómicas atribuyen al titular de la cartera con competencias en el sector la presidencia de entidades u órganos de enorme trascendencia. Cito el Centro Regional de Bellas Artes o el Consejo de Patrimonio Cultural o el RIDEA -aunque en este caso, protocolariamente-, entre otros. La presidencia de una viceconsejera al frente de estas dependencias colegiadas podría poner en riesgo la legalidad de sus importantes acuerdos. Por tanto, la rectificación sólo merece aplauso. Como también es plausible -en el mejor sentido de la palabra- el haber intentado un organigrama austero de Gobierno, aunque la limitación del número de carteras regionales ya no tenga el tope de diez que fijaron los pactos autonómicos de 1981 y recogió nuestro Estatuto hasta hace justamente un cuarto de siglo; Estatuto que, en su artículo 32.2, da plenos poderes a don Adrián Barbón y a sus antecesores para crear, denominar, modificar o suprimir consejerías y nombrar a las personas que entienda adecuadas para desempeñar el cargo. Igual que ocurre con el presidente del Gobierno de la nación, de acuerdo con el artículo 100 de la Constitución. ¿Que inicialmente quiso configurar una macroconsejería y luego rectificó? Ojalá siempre que se yerre se rectifique a tal velocidad y guiado por criterios de eficiencia. En un Gobierno de coalición y dada la problemática -seria y creciente por mil motivos- de los asuntos sociales, aumentar en una las carteras regionales para dar un tratamiento específico a algo tan sensible, es, presupuestariamente, una cuestión menor. Compárese el número de ministerios del Ejecutivo estatal PSOE-Sumar y lo de Asturias es de una prudencia elogiable
Es más, frente a ese término -'crisis'- al la que quiere darse un tono despectivo, fatalista y que, en política, se identifica con la cuarta acepción del Diccionario, yo me quedo con la séptima: «Examen y juicio que se hace de algo después de haberlo examinado cuidadosamente». O sea, autocrítica, que tiene raíz común. Por tanto, adelante siempre que se vea que algo chirría. Y mucho éxito a las personas designadas.
Diversamente, no todo van a ser elogios, me pareció irrespetuosa, curiosamente con una mayoría, la inmediata manifestación gubernamental de que lo acordado por la Junta de Fiscales del Tribunal Supremo en el delicado tema de hasta dónde llega el terrorismo en los actos del 'procés', era irrelevante porque existe una jerarquía, manda el fiscal general y a éste lo nombra el Gobierno. Un poco de respeto, por favor. Las formas hay que mantenerlas y, al menos, examinar las opiniones que no se comparten o que no interesa compartir. Nunca un silencio estaba más justificado.
En Oviedo, el jueves -y ya veremos qué pasa hoy en el transporte-, el silencio lo rompieron las bocinas de los tractores que colapsaron la ciudad, como en tantos puntos de España. Hay coincidencia y solidaridad con la situación, que todos padecemos como consumidores, en el eslabón final de la producción: carestía, escasez, baja calidad de mercancía foránea… Pero hay divergencias sobre el móvil y la posición de algunos inductores de esta movilización. Lo que faltaba. Un examen más para medir la cintura de la Unión Europea y, en su caso, para observar su capacidad de rectificar, sin abdicar de objetivos irrenunciables.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Nuestra selección
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.