Algo más que coordinación

Según Pumares la mejora de la coordinación puede cambiar la dinámica Gobierno/oposición, porque de ese trabajo saldrán buenas propuestas que la mayoría parlamentaria de izquierdas no va a poder replicar. Es preciso tener una fe ciega en el potencial que encierra la mejora de la coordinación, PP-Foro, para imaginar al Gobierno de coalición (PSOE-IU) acorralado por sus iniciativas.

Hay un momento de la entrevista en que a la mente de Pumares llegan las escenas de la transición política y para explicar el acuerdo con Queipo parafrasea al presidente Suárez: «hacer normal en el Parlamento lo que es normal en la calle». Recuerdo ese discurso televisado: Suárez sentado en un sofá, detrás de una mesa baja con papeles, pronunciando la frase que se convertiría en titular de todos los periódicos (se le atribuyó a Fernando Ónega). No veo ni la menor semejanza entre aquella situación, la presentación del proyecto de reforma política, y el acuerdo de Queipo y Pumares.

Vamos con lo más importante. Ante la hipótesis de que el acuerdo sea un paso para la fusión PP-Foro, afirma que entre los dos partidos hay «muchísimas similitudes, muchísimas semejanzas, una coincidencia programática tremenda, pero también con diferencias». Ni un ejemplo de diferencias. Cuando se le plantea si Foro sigue la senda de Ciudadanos hacia la desaparición, pone como principal diferencia que Foro tiene una «fuerte implantación municipal». Es decir, el Ayuntamiento de Gijón. Está aludiendo, sin darse cuenta, al cambio de Foro de partido regional en formación gijonesa, producto de los resultados electorales.

Y llegamos a la pregunta del millón: ¿puede asegurar hoy que en 2027 no habrá una papeleta del PP en que aparezca su nombre? «Esas respuestas envejecen mal». No puede negarlo, porque sabe que el paso del tiempo lo va a dejar en mal lugar. Faltan dos años. El futuro es un arcano, pero por debajo del acuerdo de colaboración hay algo más que la mejora de la coordinación.