La agenda del PP y Foro

Por motivos distintos, el PP también está interesado en dedicar más atención a la villa de Jovellanos. En el reciente congreso del PP de Gijón salió elegido Andrés Ruiz, como líder local. Desde que presentó su candidatura se vio que llegaba con un estilo nuevo. Por su edad, formación y experiencia, en el partido y en el Parlamento, está llamado a corregir la trayectoria mortecina de un grupo que lleva catorce años sin estar entre las dos principales formaciones de la ciudad. Esta es una razón para que Álvaro Queipo preste más dedicación a los problemas de Gijón. A ello hay que sumar el hecho de que por primera vez el PP cogobierna la ciudad. Queipo y Pumares, como muñidores del acuerdo de colaboración, PP-Foro, tienen otro interés más sutil: tener contenta a la alcaldesa de Gijón, ya que sin el respaldo de Carmen Moriyón el proyecto de la candidatura autonómica conjunta se viene abajo.

Hasta aquí el diseño. Vamos con la realidad. Un partido de gobierno, como es el PP de Asturias, tiene que centrarse en los temas más importantes de la comunidad autónoma: impuestos, modelo de financiación autonómica, sanidad, vivienda, dependencia, educación, industria, infraestructuras, ordenación del territorio, etc. Por encima de cualquier otra consideración hay que ver la región en su conjunto, si se quiere gobernar. Entre esos temas está el Hospital de Cabueñes o el vial de Jove, porque forman parte de la poblemática regional. En el tratamiento de las cuestiones no puede ser siempre la postura del Ayuntamiento de Gijón la que guíe la posición parlamentaria. Eso vale para Pumares, que no tiene la representatividad del grupo del PP (17 diputados) ni su responsabilidad regional. Pronto se va a tratar en la Junta la cuestión de las zonas tensionadas, apoyada por Foro en el Ayuntamiento de Gijón y ahora rechazada al comprobar que en esas zonas (Cimavilla, La Arena) el Principado va a topar los alquileres. Se puede enmendar el desaguisado, pero partiendo del grave error municipal votando a favor de algo sin conocer sus consecuencias.