Éramos pocos...

.. Y parió la abuela. Para ser más exactos, y según contaba EL COMERCIO en última plana del pasado viernes, la abuela que parió es Safina Namunkwaya, una ugandesa que ha dado a luz a gemelos con 70 años de edad. Se ve que ... en Uganda no tienen condones ni conciencia de 'babyboom', pues otra fértil paisana de la abuela Safina, Mariem Nabatanzi, acumula una camada de 44 hijos, y ninguna de las dos tiene con qué alimentarlos. Lo cual es la muestra de por qué África exporta excedentes humanos. Es gente carente de criterio y de condones, y se supone que también de pañales, y por eso soporta una insufrible superpoblación. Así les va. Y así nos va a ir a los demás, que el hombre está dejando el planeta para el arrastre por culpa de una demografía descontrolada que va cubriendo la tierra de espacios invivibles, estériles e inertes, con tanto asfalto, tanto humo y tanta urbanización. Cuéntale eso a los actuales ocho millones de venezolanos exiliados por la fuerte necesidad de echarse algo al coleto. O a los rohingyas. O a los millones de desterrados que hoy deambulan a la deriva, como aves migratorias, merodeando por un mundo hostil, a la caza de un simple plato de fabes. Incluso hay quien ha entendido mal la lógica lucha contra el dañino lema de 'creced y multiplicaos' recomendado por el dios de la mitología hebrea, y promueve métodos anticonceptivos tan salvajes y poco humanitarios como son los de Netanyahu: matanza de inocentes y eliminación a balazos del sobrante, táctica similar a la del Putin en Ucrania. Me gustaría saber qué plan natalista tendrá en la mente ese manifestante que ante la sede del PSOE en la calle de Ferraz se golpeaba el pecho desnudo mientras gritaba «¡yo soy nazi!». Supongo que será de los partidarios de tener hijos para soltarlos por trincheras o autovías, y exigir luego indemnización o paguita por atropello.