Borrar

En ebullición

Verás lo que tarda el Mediterráneo, ahora ya con aguas a 28 grados, en convertirse en una cloaca como la del Mar Menor de Murcia

Martes, 8 de agosto 2023, 01:02

Antonio Guterres, secretario general de la inoperante ONU, ha vaticinado la llegada de una ebullición global. Se ve que nuestro sol aprieta como de costumbre, pero ahora, para achicharrar al planeta azul, dispone de aliados, nosotros mismos, tú, yo y el de más allá. Y ... es que el hombre, atento a satisfacer sus intereses inmediatos sin reparar en el incierto futuro, está empeñado en destruir el fundamento de cuanto le da de beber y de comer, con la excepción de los 800 millones de hambrientos que ni tienen con que sustentarse, y a los que pronto, si la cosa sigue así en esta Tierra que nos soporta, nos sumaremos 8.000 millones de humanos vivos. Que para modificar hoy la faz atmosférica y terrena se bastan el calor y los humos que desprenden los millones de motores de coches, barcos o aviones que circulan o se atascan en esas carreteras de dios y de asfaltos hirvientes. Es más, si usted recurre al acondicionador de aire o al frigorífico para disfrutar del fresco sin abanico, sepa que el aparato suelta al exterior, vaya paradoja, el doble de calor que el frío que fabrica. Verás lo que tarda el Mediterráneo, ahora ya con aguas a 28 grados, en convertirse en una cloaca como la del Mar Menor de Murcia, ese infecto cenagal al que ahora van a amurallar con urbanizaciones modelo levantino y benidormés. Vayan sumando a todo ello las aguas sin depurar que los países ribereños vierten al pozo negro del Mare Nostrum y verán cómo les salen los peores augurios. Añadan luego cocinitas, duchas, fábricas, asadores, farolas, lucecitas varias, el arboricidio que arruina los montes, la invasión agrícola de los espacios naturales y cotos como el de Doñana. También el modelo de urbanismo 'abudhabí', esa descabellada bravata arquitectónica de horteras ricos, empeñados en levantar 'Nuevayorks' en mitad de desiertos huérfanos de vegetal. ¿Y qué harán con sus desechos los 1.400 millones de chinos? ¿Y qué con sus residuos los 1.400 millones de esa India en donde las olas de calor matan cada verano a cientos? Y eso sin que el jodido sol se detenga, pues cada mañana sale dispuesto a calentarle los melanomas al personal, a apretar para divertirse viendo cómo los curritos de Phoenix o de Córdoba andan a saltitos de canguro para no pelarse la planta de los pies. En ebullición estamos, aunque algunos se llamen a andana y viajen al Polo Norte para cargar en su yate hielo de icebergs con el que hacerse cubitos árticos para el cubata, que hay gente para todo y por eso no tenemos remedio. ¿'Ebulliremos'? Ebulliremos.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcomercio En ebullición