Borrar

Literatura: compromisos y perversiones

Manuel Rico se ocupa con meticulosidad de la literatura en 'La ficción y la vida' (Silex). Con ánimo de exégesis y comprensión, pero también con pasión y ganas de evangelizar acerca de la buena nueva de sus milagros

Lunes, 16 de septiembre 2024, 02:00

En los cambios generacionales se suele matar al padre, y en literatura, se le suele enterrar hondo. En poesía, los 'novísimos' renegaron de los poetas precedentes, y en los 80 los narradores tacharon de «costumbrismo» casi todo lo que se hizo en los 50 y ... 60. Una de las duramadres del ensayo de Manuel Rico 'La ficción y la vida' (Silex) es reivindicar esa literatura realista y patria (que no dejó de contaminarse con narradores extranjeros), poner de relieve las condiciones heroicas en las que se trabajó, y establecer paralelismos con, por ejemplo, los autores anglosajones (tan reivindicados como padres literarios por los nuevos narradores, a fin de distanciarse del 'provincianismo'), que también trabajaron con su terruño y la memoria. Faulkner exploró el Profundo Sur igual que Ignacio Aldecoa la Profunda España, o John Cheever y Richard Ford lidiaron con los demonios de la clase media americana, igual que García Hortelano con nuestras miserias. Podríamos decir que los gringos también huelen «a ajo y morapio», por utilizar una celebérrima expresión de Vicente Molina Foix.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcomercio Literatura: compromisos y perversiones