Exhortación

Pienso en la brutalidad de la propuesta al ver tanta falta de empatía de quienes se 'escapan del confinamiento' propagando con su actitud un virus que lleva, ya, más de dos millones de muertes.

Esta semana, y mientras un pequeño grupo de estudiantes esperaban en fila, en la acera, a que les diesen autorización para entrar en el colegio, un hombre caminaba a su lado con la mascarilla bajada y fumando un cigarrillo. Una de las niñas hizo un comentario de manera correcta, en el que manifestaba su malestar al que, rápidamente, se sumó parte del alumnado.

El personaje, lejos de apagar el cigarrillo y subirse la mascarilla, dio una calada y exhaló el humo en dirección a la fila. Seguro que este es un hecho aislado y, pese a la gravedad del mismo, no pienso que a este espécimen hubiese que romperle la cabeza, aunque creo que sí merecería una sanción ejemplar.

Compruebo cada día que, mayoritariamente, la población cumple las recomendaciones que llegan desde las autoridades. Por eso duele más que actitudes insolidarias sean las que lleven al desastre sanitario y, con él, al cierre de negocios, con el consiguiente empobrecimiento económico.

Al principio de la pandemia se utilizó de manera recurrente una frase que decía 'esta batalla la vamos a ganar entre todos' y sí, seguro que la ganaremos pero, parece evidente que, no todos contribuirán a este triunfo de la misma manera.