Borrar

Recuerdo los discursos del 'Mago' portador de buenos deseos con poso ético que oscurecía la llegada de Papa Noel; no entraba por la chimenea, sino por la ventana televisiva anticipo de la cena con belén al fondo, foto familiar, poco a poco retocada o recortada, ... pose fronto-lateral y sermón laudatorio de nuestra virtud afortunada de tener un rey como Dios manda aunque llegara por vía subterránea. Le recuerdo insistir en una justicia igual para todos, incluso para el yerno heladero, pillado con el carrito. Podía dudar de la institución, no de quien obró el milagro de convertir en fan al antimonárquico que hoy, marca distancias, pero jalea la vigencia de la institución; el ayer admirador pragmático resultó monárquico incondicional.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcomercio El Rey (d)emérito