Cabueñes, ocho años después

Mayo de 2017. El siguiente consejero de Sanidad, Francisco del Busto, presenta en la casa consistorial un proyecto de ampliación, acompañado de la alcaldesa Moriyón y del resto de portavoces municipales, incluido el mismo señor Pérez, ya no como diputado sino como concejal. Se anunciaron 23 millones de euros, más 9 en equipamientos, a acometer hasta 2021.

De Tino a Paco y de Paco a Pablo (y por el medio una nueva alcaldesa, la señora González) y 50 millones menos y ocho años más de espera. Y sin que se diga por qué. No sabemos si porque las necesidades son distintas, o si antes no estaban justificadas, o si de lo que se trata es, más bien, de seguir parcheando, poniendo la entrada del hospital, donde hace una década se quitaba.

Lo cierto es que estamos en 2021 y poco o nada se ha hecho. Ahora, está por ver. El actual consejero anunció hace semanas que para finales de este año se adjudicarían las obras. Es decir, en la fecha en que nos dijeron que se inauguraría el nuevo hospital. De traca. Pero en todo caso, con el anuncio no se resuelve el problema de fondo del hospital gijonés, que no es otro que determinar qué posición ocupa en el sistema sanitario asturiano. ¿Qué quiere hacer de Cabueñes la consejería o, más exactamente, los dirigentes sanitarios de la FSA? ¿Tiene la misma importancia para ellos Cabueñes que Jarrio o Arriondas?

Con un modelo hospitalario como el asturiano, fuertemente centralista, que convierte al HUCA en el centro de referencia de todas las especialidades, con la consiguiente concentración de personal y recursos, el centro gijonés siempre va a estar en muy segundo plano. Da igual que atienda a la mayor población de Asturias o sea la cabeza de la segunda Área Sanitaria por población, o que tenga profesionales de acreditada competencia. Con el actual modelo, Cabueñes está a la sombra del HUCA, y mientras así siga, con 53 millones o con 100, los gijoneses seguiremos teniendo un hospital con importantes carencias de personal y de dotación presupuestaria. Por eso urge cambiar el modelo hospitalario actual, para que los gijoneses podamos contar con el hospital que, como mayor ciudad de Asturias, nos merecemos.