Mi decisión de incorporarme a la ejecutiva plural e integradora de Monchu tiene que ver con una reflexión sobre el momento político en que nos ... encontramos.

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La situación de amenaza a los valores democráticos y a nuestro modo de vida, con la guerra a las puertas de Europa o las terribles imágenes de los deportados norteamericanos de ayer exigen posiciones claras. Aunque parezca lejano, estamos viviendo en una ciudad donde gobierna una alcaldesa investida por los votos de un partido como Vox que avala algunas de estas posiciones extremas. El valor de los ritmos precisos de nuestros procesos congresuales, está en su regularidad. Con ello se marca un tiempo de reflexión para las propuestas políticas y de elección democrática de nuestros órganos de gestión a todos los niveles.

Este proceso en cascada de mayor a menor marca también el tono de debate interno. Del congreso federal y autonómico asturiano salieron ejecutivas fuertes, diversas y con un respaldo muy mayoritario. El partido en Asturias está unido y cuenta con una ejecutiva amplia y renovada, que «habla con acentos diferentes», en palabras de nuestro secretario general Adrián Barbón.

Esto se consigue con un proceso de incorporación de personas a los equipos a lo largo del mandato, de trabajo en común, de conversaciones y acuerdos cumplidos.

A nivel local, ese mismo proceso se ha producido, tanto conmigo como con otras personas de la agrupación. En los últimos dos años, he trabajado con Monchu en la Junta General y en la agrupación. Hemos llegado a acuerdos y pactado desacuerdos y hemos avanzado en un camino de confianza, que ha me ha llevado a decidir asumir responsabilidades en nueva ejecutiva.

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El valor de un acto se juzga por su oportunidad, decía Lao Tsé, y creo que lo oportuno ahora es unirse para conseguir una agrupación socialista de Gijón fuerte que incorpore todo su potencial.

La razón de ser de nuestro partido es contribuir a alcanzar una sociedad mejor, con los principios de libertad, igualdad, solidaridad y justicia social. Al servicio de la ciudadanía, con un modelo de gestión transparente, abierta a la innovación, una política participativa y próxima a las necesidades de las personas.

Nuestra visión de Gijón es la de una ciudad industrial, innovadora, solidaria, sostenible y valiente. Que afronte retos y que no deje escapar oportunidades. Una ciudad que sea el motor de Asturias y no vaya a remolque de nadie.

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Estoy segura que este domingo, 23 de marzo, tendremos un partido preparado para afrontar los próximos retos y con la capacidad de presentar una candidatura a las próximas elecciones que la ciudad considere valiosa y digna de su confianza para dirigir Gijón, en estos tiempos de cambios, amenazas, pero también de oportunidades.

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