Patinetes eléctricos: una nueva forma de movilidad

Antes de utilizar un patinete eléctrico se debe comprobar que cuenta con el marcado CE como garantía de calidad y seguridad. Además, debemos asegurarnos de que está debidamente homologado.

Al considerarse vehículos, está totalmente prohibido circular por las aceras o por áreas peatonales. Si el dispositivo no supera los 25 km/h han de ir por el carril bici correspondiente o, de no haberlo, por una calzada con una limitación de velocidad máxima de 30 kilómetros por hora.

Para evitar algunas de las lesiones más frecuentes en caso de accidente, se recomienda e incluso puede ser de obligada utilización el uso del casco, combinándolo con el uso de rodilleras y guantes.

En cuanto a la edad, no se recomienda su utilización hasta los 10-12 años y en función de la normativa de cada ayuntamiento, puede exigirse que la persona tenga una edad mínima para no ser sancionado.

Consultar el móvil, escribir mensajes y conducir con auriculares, además de ser un riesgo para la circulación puede implicar sanciones en función de las normativas de cada ayuntamiento. Si se conduce de noche, es importante incorporar elementos reflectantes y llevar luces encendidas siendo más visibles para otros conductores o peatones.

Se trata de vehículos unipersonales, con lo cual llevar a otra persona puede conllevar sanciones. Conducir bajo los efectos de las drogas o el alcohol y negarse a someterse a pruebas de alcoholemia o de consumo de drogas, puede conllevar sanciones económicas, condenas de prisión o meses de trabajos para la comunidad, en función de las normativas de cada ciudad.

Realizar revisiones periódicas del funcionamiento de los frenos, el estado de las ruedas y la carga de batería será importante para evitar incidentes. Puede ser un elemento muy útil para los conductores que accedan a parking disuasorios y recorrer el 'último kilómetro'. Además es conveniente, aunque de momento no es obligatorio, disponer de un seguro que dé cobertura a posibles daños personales que se puedan causar, daños sobre el vehículo, o incluso es posible contratar un seguro de asistencia por avería o robo.