El nuevo dispositivo de la DGT que tendrás que llevar en tu coche antes del verano

La Dirección General de Tráfico obligará en unos meses a los vehículos nuevos y homologados a llevar instalado un ISA, un Asistente de Velocidad Inteligente para reducir los accidentes por exceso de velocidad. La medida forma parte de un paquete de sistemas de seguridad aprobado por la Unión Europea en 2018.

El dispositivo se encuentra dentro de los Sistemas Avanzados de Asistencia a la Conducción y será obligatorio solo en aquellos vehículos de nueva fabricación dentro del mercado europeo. Su funcionamiento se da a través de un software que se encarga de conectar el Control de Crucero Adaptativo al GPS con un sistema de Reconocimiento de Señales. El sistema avisa al conductor cuando se rebasa la velocidad máxima en la vía e incluso puede llegar a controlar el acelerador ante el exceso de velocidad. Si bien no actúa sobre el freno, el vehículo puede llegar a ralentizarse hasta el límite de velocidad.

El sistema funcionaría mediante una cámara interior instalada en el espejo retrovisor a través de la que el vehículo va recopilando información junto a radares y el GPS en combinación con un mapa digital. Cuando a través del sistema de reconocimiento detecta el límite de velocidad se lo comunica al conductor de forma gráfica a través de la instrumentación. El ISA se adapta automáticamente al límite que rige en cada uno de los tramos de la vía, no permitiendo al conductor que lo supere.

Por lo tanto, aumenta la seguridad a la hora de circular por carretera, así como reduce las emisiones haciendo que los coches sean más ecológicos y menos contaminantes. Junto a esto, se produce un ahorro del combustible y contribuye a reducir las multas por superar la velocidad máxima de la vía. Finalmente, también ayuda a mejorar la percepción de la seguridad en carretera, fomentando el uso de bicicletas ya que los usuarios no se sienten tan vulnerables ante los coches.

El exceso de velocidad constituye la tercera causa de accidente de tráfico más común junto al consumo de alcohol y las distracciones al volante, de ahí la insistencia porque los conductores cumplan los límites legales y la implementación de medidas como el ISA o el helicóptero Pegasus.

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