Cómo funciona la pila de combustible en los vehículos de transporte

La movilidad basada en el hidrógeno tiene varias ventajas significativas. En primer lugar, no produce emisiones de CO2 durante el funcionamiento del vehículo, lo que contribuye a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y ayuda a combatir el cambio climático. Además, los vehículos de pila de combustible ofrecen un rendimiento similar al de los vehículos convencionales en términos de autonomía y tiempo de repostaje, lo que los hace adecuados para aplicaciones que requieren largas distancias y tiempos de actividad prolongados.

Básicamente el coche de hidrógeno es un vehículo eléctrico dotado con celdas de pilas de hidrógeno y una pequeña batería para almacenar los sobrantes de energía que utilizará en el momento que convenga. Es un coche de cero emisiones, ya que solo emite agua por el tubo de escape.

El funcionamiento de un coche de pila de combustible, simplificado al máximo, sería el proceso electroquímico que se produce al mezclar hidrógeno con oxígeno y que provoca la propulsión del vehículo. Durante esa mezcla, se genera una electricidad que pasa a unas baterías y de las baterías al motor, con la única emisión de vapor de agua y nitrógeno.

El conocimiento de Isuzu en el diseño, desarrollo y fabricación de camiones, junto con la experiencia de Honda en el desarrollo de sistemas de pila de combustible de hidrógeno y su aplicación en la movilidad, permite tener grandes expectativas con los resultados de la colaboración entre ambas firmas.

En este contexto Honda e Isuzu han firmado un acuerdo de colaboración para desarrollar y suministrar un sistema de pila de combustible de hidrógeno para camiones de carga pesada.

Honda e Isuzu comparten la creencia de que la tecnología de pila de combustible, que utiliza el hidrógeno como combustible y no emite CO2 durante su funcionamiento, puede desempeñar un papel crucial en la consecución de la neutralidad de carbono en camiones de carga pesada. Estos vehículos son requeridos para hacer frente a la gran capacidad de carga, el uso prolongado, la conducción a larga distancia y la necesidad de repostajes rápidos. Claves para rentabilizar cualquier procedimiento logístico. El horizonte que se han puesto ambas compañías para lanzar su primer camión es el año 2027.

Desde la firma del acuerdo de investigación conjunta en enero de 2020, ambas compañías han estado trabajando en el desarrollo de tecnologías fundamentales, como garantizar la compatibilidad de las pilas de combustible con los camiones de carga pesada y el desarrollo de tecnologías de control de vehículos. Actualmente, ya se está trabajando para iniciar las pruebas con un camión prototipo en carreteras públicas antes de un año.