Hay una serie de recomendaciones para ahorrar en combustible en los desplazamientos de Semana Santa. REUTERS

¿Cómo ahorrar gasolina en los viajes en coche en Semana Santa?

Con los precios de los combustibles en máximos históricos, existen una serie de recomendaciones con las que podemos reducir el consumo

EL Comercio

Gijón

Jueves, 7 de abril 2022, 20:12

En las próximas días comenzarán las vacaciones tan esperadas de Semana Santa con dos festivos nacionales en nuestro país. Tras dos años de restricciones en viajes por la pandemia la Dirección General de Tráfico prevé 14,6 millones de desplazamientos de largo recorrido por nuestras carreteras. Los precios de la energía y carburantes están en máximos históricos y cualquier recomendación para ahorrar gastos es bienvenida.

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Se debe hacer una revisión del vehículo antes de salir de viaje, que evitará sustos e imprevistos en la carretera y, en muchos casos, gastos indeseados por averías que se podían haber evitado. Es recomendable echar un vistazo bajo el capó para comprobar los niveles de aceite, líquido refrigerante y líquido del limpiaparabrisas.

Es importante también asegurarse de que los faros, intermitentes y luces de freno funcionen correctamente. Antes de salir de viaje, se debe comprobar la fecha de caducidad del kit de primeros auxilios y el número de chalecos reflectantes.

En cuanto a los neumáticos «no debemos olvidar que es el único elemento de contacto entre el vehículo y la carretera, por tanto, su mantenimiento en buenas condiciones es fundamental», nos recuerdan desde Bridgestone y hacen las siguientes recomendaciones:

-Comprobar que los neumáticos lleven el nivel de presión correcto. Circular con menos presión en las ruedas del recomendado por el fabricante aumenta el consumo un 1% por cada 0,1 bares de presión menor a la adecuada, y en un año o 20.000 km, el gasto extra medio será de entre 80 y 100 euros más que con las ruedas con la presión correcta.

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-Comprobar la profundidad del dibujo de la banda de rodadura (siendo la mínima legal 1,6 mm). Si los testigos de desgaste (pequeñas marcas perpendiculares al sentido de la marcha) están al nivel del dibujo, es el momento de cambiarlos. Como truco, basta con insertar una moneda de un euro en la banda y si se puede ver el borde amarillo, es hora de un cambio.

-Comprobar si hay rasguños, cortes y/u otros daños en los neumáticos. Además, las altas cargas durante los viajes y un nivel bajo de presión podrían provocar un reventón y, en consecuencia, la posible pérdida de control de la dirección, cuyo desenlace, en el mejor de los casos, será tener que parar a cambiar el neumático con la correspondiente pérdida de tiempo y el riesgo a nivel de seguridad, según donde se haya producido el reventón.

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-Usar los neumáticos apropiados para cada estación del año, en este caso los de verano (se recomienda hacer el cambio de neumáticos de invierno a verano y viceversa cuando se hacen los cambios horarios). Otra buena opción son los neumáticos 'todo tiempo', ideales para los conductores que viven en zonas templadas, donde los inviernos pueden ser suaves, pero tienen condiciones meteorológicas muy impredecibles y buscan la comodidad de tener un único juego de neumáticos para todo el año.

Cómo ahorrar en carretera

Desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) han recordado la posibilidad de ahorrar hasta un 20% en carburante priorizando las estaciones económicas y las asociadas a súper e hipermercado, lo que podría suponer un ahorro de hasta 20 euros de gasóleo cada vez que se llena el depósito.

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Otras recomendaciones son:

Otras recomendaciones para ahorrar combustible son:

  • apagar el motor en las paradas largas si el vehículo no dispone de sistema start-stop; usar el freno-motor siempre que sea posible (de este modo, se reduce el consumo del vehículo hasta un 2%, ya que al soltar el acelerador, el combustible prácticamente se detiene).

  • mantener las revoluciones controladas, sin acelerones.

  • cambiar el filtro del aire y no circular con elementos que perjudiquen la aerodinámica del vehículo, tales como bacas por ejemplo, o circular con las ventanillas o el techo abierto, hace que incremente la resistencia al aire del vehículo, provocando un incremento de consumo de combustible.

  • respetar los límites de velocidad (sobrepasar la velocidad recomendada puede aumentar el consumo en un 20%).

  • no sobrecargar innecesariamente el vehículo (hace que requiera más potencia para desplazarse).

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