La OTAN confirma el envío de tropas norcoreanas a Rusia

El jefe político de la Alianza destacó que este movimiento de Pionyang es, además, «una expansión peligrosa» de la contienda en Ucrania, por lo que pidió que se «cesen» inmediatamente estas acciones. Aunque la OTAN no detalló el número de militares norcoreanos desplegados en Kursk, hace apenas una semana, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, aseguró que 10.000 soldados del régimen comunista se encontraban en el territorio ocupado del Donbás, preparados para entrar en combate. «Este es el primer paso hacia el inicio de una conflagración mundial», advirtió a los líderes europeos.

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Por su parte, Rutte transmitió que el envío de estas tropas «evidencia la cada vez más profunda colaboración militar entre Rusia y Corea del Norte». Desde el inicio de la guerra, Pionyang ha distribuido millones en munición de artillería y misiles balísticos, a cambio de tecnología militar y otros apoyos para evitar las sanciones internacionales. «Las democracias nos tenemos que unir para defender nuestros valores», afirmó.

Rutte añadió que la llegada de fuerzas norcoreanas es también señal de la «desesperación cada vez mayor de Putin». Después de más de dos años de guerra y con más de 600.000 soldados muertos o heridos, «Moscú no es capaz de sostener el conflicto sin apoyo externo», defendió. Mientras, prometió que los aliados seguirán apoyando a Kiev y que ya están discutiendo un plan para reforzar aún más el apoyo militar a Ucrania.

El despliegue de tropas de Corea del Norte en Ucrania supondría la primera intervención de un tercer país en el conflicto. China ha sido el gran aliado de la industria bélica de Moscú e Irán ha provisto al ejército ruso de drones y equipamiento de uso militar; sin embargo, ninguno de estos dos países ha dado el paso de enviar militares al país.

También este lunes la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, mantuvo una conversación telefónica con el presidente de la República de Corea del Sur, Yoon Suk-Yeol, en la que discutieron esta cuestión. El envío de soldados -sumado a que el país «está aumentando» la entrega de equipamiento letal-, «es una grave escalada en la guerra y una amenaza a la paz global. Responderemos juntos y en cooperación con nuestros aliados», defendió la política alemana.