Hezbolá muestra su resistencia con el lanzamiento de 250 proyectiles sobre Israel

En un comunicado, la organización armada chií informó de «un ataque aéreo utilizando una andanada de misiles y un enjambre de drones explosivos contra la base naval de Ashdod», en el sur de Israel, así como de otro lanzamiento de proyectiles contra la base de Inteligencia del ejército en Gilot, en las inmediaciones de Tel Aviv. Los ataques fueron confirmados por el ejército hebreo, que precisó que algunos de los artefactos habían sido derribados en pleno vuelo. Hezbolá también asumió los lanzamientos de proyectiles efectuados sobre las localidades de Kfar Blum y en Haifa, en el norte del país, donde uno de alcanzó un edificio residencial.

La acción de la milicia libanesa se ha producido tras los últimos bombardeos israelíes sobre Beirut que han dejado más de 80 muertos. Uno de ellos el portavoz de Hezbolá, Mohammed Afif. Asimismo, el último ataque lanzado por Israel contra la capital libanesa el pasado viernes acabó con la vida de otro alto cargo de la organización, Mohamed Haydar, además de matar a otras 29 personas y causar heridas a 67 más.

El ejército libanés, que no está implicado en esta guerra, también ha informado de que uno de sus soldados ha muerto y otros 18 han resultado heridos, algunos de gravedad, en un ataque hebreo contra una de sus instalaciones militares en el sur del país, a la que causó «importantes daños». «El ataque directo del ejército israelí contra una posición libanesa es un mensaje directo y sangriento de rechazo a todos los esfuerzos por lograr un alto el fuego», denunció el primer ministro de Líbano, Nayib Mikati.

Más de 40 militares libaneses han fallecido ya desde que comenzó la ofensiva israelí contra la Franja de Gaza en octubre de 2023 y la expansión del conflicto a Líbano.

Por otra parte, Tel Aviv calificó de «acto odioso de terrorismo antisemita» el asesinato en Emiratos Árabes Unidos de un rabino con doble nacionalidad israelí y moldava. Sobre este hecho las autoridades emiratíes mantuvieron un estricto hermetismo y se limitaron a confirmar que se había hallado el cuerpo de Tzvi Kogan, quien estaba desaparecido desde el pasado jueves. No se dio más información ni sobre el lugar donde se encontró el cadáver, las circunstancias que rodearon su muerte ni sobre posibles sospechosos.

Tzvi Kogan era un emisario en Emiratos Árabes Unidos del Jabad-Lubávich, un movimiento ultraortodoxo que busca reforzar la identidad judía y acercar a los hebreos a su fe en el mundo, según medios israelíes.

Su muerte «es un acto odioso de terrorismo antisemita», denunciaron en un comunicado conjunto el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y su Ministerio de Relaciones Exteriores. «El Estado de Israel usará todos los medios a su alcance para garantizar que se haga justicia y que los responsables de su muerte rindan cuentas», añadieron.