Secciones
Servicios
Destacamos
El dictador de Corea del Norte, Kim Jong-un, ha encontrado una solución un poco 'extravagante' para el problema de falta de fertilizantes para la agricultura del país. Ha pedido a sus ciudadanos que guarden sus deposiciones para utilizarlas como abono.
La medida incluye la obligación de que cada norcoreano aporte 500 kg de excrementos al año, lo que es tres veces más de la media que una persona adulta produce en doce meses.
Debido a esta exigencia, ya se han producido peleas y enfrentamientos entre ciudadanos que intentaban apropiarse de las deposiciones de baños públicos o comunitarios.
«La cuota de los estudiantes de primaria, secundaria y preparatoria es de 200 kg», según ha informado Radio Free Asia.
No es la primera exigencia o prohibición llamativa que el líder norcoreano ha realizado a su pueblo. En verano de 2023 prohibió suicidarse a la población norcoreana por considerar que es una «traición al socialismo». La medida coincidió con una grave escasez de alimentos que asoló al país y que llevó a muchos ciudadanos hasta el límite de sus fuerzas.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.