La cifra de bajas rusas en Ucrania crece hasta casi mil muertos y heridos al día

Este incremento, a su juicio, es una consecuencia de la «guerra en masa y de desgaste» por la que ha optado Moscú. «Aunque es costosa en términos de vidas humanas, el resultado es un incremento de la presión sobre las posiciones de Ucrania en el frente», reconocieron desde Londres.

Según las estimaciones británicas, Rusia ha sufrido 355.000 bajas entre combatientes muertos y heridos. Aun así, el ejército del Kremlin ha recuperado parte del terreno perdido. A mediados del pasado febrero se produjo la retirada ucraniana de la localidad de Avdiivka. Su caída tiene un valor simbólico a las puertas de las elecciones presidenciales que revalidarán a Vladímir Putin en el poder. Un éxito así refuerza la estrategia militar rusa, confirma que Moscú ha recuperado la iniciativa bélica y deja en evidencia el fracaso occidental para cubrir las necesidades armamentísticas reclamadas por Kiev.

La ocupación de Avdiivka, en la región de Donetsk, es el mayor éxito ruso desde mayo pasado. Entonces, el ejército de Putin arrebató al ucraniano la cercana localidad de Bajmut, escenario, durante meses, de los combates más encarnizados de esta contienda que ya ha cumplido dos años.

Varios niños y una mujer fueron hallados muertos bajo los escombros de un edificio destruido por un dron ruso en Odesa. Las autoridades ucranianas elevan a doce el número de víctimas, cinco de ellas menores de edad. El ataque se produjo durante la madrugada del sábado y alcanzó un edificio de nueve plantas en esta ciudad portuaria del mar Negro, causando importantes daños en 18 apartamentos.

«Marc no tenía aún tres años; Yelizaveta, ocho meses, y Timofei, cuatro meses», enumeró el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en Telegram. «Los niños ucranianos son blancos militares de Rusia», denunció. Poco antes, el gobernador de la región de Odesa, Oleg Kiper, informó de que los socorristas habían encontrado el cuerpo de una mujer y de un bebé junto a ella. «Estaban abrazados el uno contra el otro», describieron los servicios de emergencia ucranianos.

Zelenski denunció el «terror» ruso que busca «exclusivamente destruir vidas» y volvió a pedir a sus aliados occidentales más sistemas de defensa antiaérea, aviones de combate y municiones para frenar la invasión.