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Tres miembros de la Unidad Canina del Principado partían esta tarde rumbo a la ciudad de Derna, en Libia, con la dura tarea de encontrar supervivientes tras la tormenta Daniel que el pasado domingo y el lunes descargó lluvias torrenciales arrasando a su paso con ... todo lo que encontró y que ya arroja un saldo de 3.000 muertos y 10.000 desaparecidos.
Wenceslao Fernández Iglesias, responsable de la Unidad Canina de Rescate, junto a Efén Rodríguez Meana y Rubén Rocandio, miembros del equipo, llegaban a primera hora de esta tarde al aeropuerto de Madrid. Desde Asturias y hasta la capital, como apoyo, dos bomberos del Principado les acompañaron y les trasladaron en uno de sus vehículos. Un día antes, partieron los guías asturianos pertenecientes a la unidad Elena Marcos y Miguel de Prado. Se enfrentaron ya a problemas de embarque en Madrid y no pudieron hacerlo hasta las cinco de la madrugada.
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Johana Gil
«Es una riada. Yo estuve en la de Biescas (en agosto de 1996, que arrasó el camping de Las Nieves), conoces situaciones similares pero te preguntas 'a ver con lo que nos encontramos allí'», contó a EL COMERCIO Wenceslao Fernández, desde el aeropuerto de Madrid momentos antes de embarcar rumbo hacia la ciudad costera libia. Pese a estar acostumbrados a estas situaciones, reconoce que «es duro».
Junto a estos cinco asturianos viajan cuatro perros, encargados de rastrear entre los escombros. «Llevamos tres perros de búsqueda de supervivientes y un perro de búsqueda de cadáveres». Ellos son 'Mini', 'Chuli', 'Anja' y 'Kenia'.
Todos estos profesionales están curtidos en este tipo de trabajos. De hecho, Elena Marcos y Miguel de Prado, participaron el pasado mes de febrero en las labores de rescate en las zonas afectadas por el terremoto ocurrido en Turquía y Siria con epicentro en el sureste de Turquía, y contaron a EL COMERCIO sus tareas en aquellos momentos.
Ahora, desconocen plazos y el escenario sobre el que se moverán, pero entienden de sobra cómo se desarrollan estos trabajos, tras sus intervenciones en desastres de parecida magnitud. «Por experiencia, el plazo que permaneceremos allí es similar al de otras misiones, así es que no estaremos más de cuatro o cinco días, el gobierno libio no nos lo permitirá», asegura Fernández.
En principio, todos se instalarán en Derna, la ciudad más afectada por un tsunami que arrastró barrios enteros, situada a orillas del Mediterráneo y distante a unos 900 kilómetros de Trípoli, la capital. «Hay muchos equipos españoles y estaremos en las zonas que nos asignen, allá donde seamos necesarios; son las autoridades las que deciden estas cuestiones», reconoce el responsable de la Unidad Canina de Rescate.
Se mantienen en coordinación con la ONG Acción Norte, especializada en temas de protección civil y sanitaria y acciones de rescate, búsqueda y salvamento de personas, así como con las embajadas de ambos países. «Contamos con el apoyo del Servicio de Emergencias del Principado que, como siempre, está respondiendo de maravilla y eso es muy importante en casos como estos».
Por su parte, los esfuerzos no cesarán durante todo el tiempo que les sea permitido. «Como siempre en estas catástrofes, el tiempo corre en contra. Sabemos que ha sido de gran magnitud, por lo que las posibilidades de encontrar vidas son cada vez más escasas».
De hecho, desde que el pasado domingo se produjo esta tragedia, la cifra de fallecidos ha ido aumentando a pasos agigantados y las desapariciones no parecen albergar muchas más esperanzas.
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