Rosa Peral y el crimen de la Guardia Urbana en la serie 'El cuerpo en llamas': la realidad supera a la ficción

'Las cintas de Rosa Peral' muestran a través de casi hora y media de entrevista unos impactantes testimonios desde la cárcel en los que Rosa quiere mostrar una imagen de inocencia muy lejos del arrepentimiento que podría sentir alguien que asesinó a la que fuera su pareja. Periodistas y el fiscal del caso participan en esta película documental aportando datos sobre un crimen que durante estos años ha dado para que guionistas hayan querido llevarlo a la ficción con la serie 'El cuerpo en llamas', protagonizada por los actores Úrsula Corberó y Quim Gutiérrez.

La serie bebe de fuentes como el libro 'Sólo tú me tendrás' de Toni Muñoz, periodista especializado en sucesos y que hace un repaso a la serie para comparar realidad y ficción. Añadir ese toque de misterio propio del cine y de dramatismo funciona muy bien para crear un romanticismo a una historia que difiere de una realidad que ya de por sí es escabrosa. A Rosa en la serie la detienen en su casa cuando una investigadora se presenta en el chalet que compartía con Pedro, su pareja y víctima, y las hijas de esta. La realidad es que Rosa, presa del miedo por verse descubierta tras doce días fingiendo la desaparición de Pedro, se presenta en comisaría para culpar a Albert del asesinato y narrar a la policía cómo se produjeron los hechos y cómo llevaron el cadáver en el coche para después quemarlo. Rosa nunca salió de esa comisaría y en 2020 fue condenada a 25 años de cárcel. La detención de Albert también fue en la comisaría en la que trabajaba con una frase que sorprende: «¿No soy el único detenido, verdad?».

La asesina siempre ha intentado mostrar a su pareja como alguien celoso, impulsivo y agresivo. En el juicio, lo acusó de maltrato físico debido a los celos que Pedro tenía hacia Albert, quien también describía a la víctima como alguien violento. Sin embargo, Albert tenía en su historial un episodio oscuro tras la muerte de un mantero en 2014 de la que fue absuelto gracias a la declaración de Rosa que lo exculpó.

La vida en la cárcel durante estos años no ha sido nada fácil para Rosa que sobrevive con 120 euros al mes y con una deuda hacia la familia de Pedro. Por ello, su abogada ha intentado frenar esta serie para que no vea la luz hasta, al menos, cobrar derechos de autor para su clienta, así como de todos los libros que se han publicado del caso y de los que Rosa Peral no ha visto un solo euro. La demanda ha sido desestimada en varias ocasiones por falta de competencia territorial.