Mitos y consejos contra la resaca

Lo primero es identificar las causas de la resaca y la deshidratación es la principal. El cuerpo se deshidrata por la ingesta de alcohol que suprime la liberación de vasopresina, una hormona que envía señales a los riñones para que estos funcionen correctamente en caso de que el cuerpo pierda líquidos.

Otra causa del malestar físico y anímico que se sufre a la mañana siguiente de una noche de fiesta es la caída de azúcar en sangre. Al beber alcohol, el revestimiento del estómago se irrita haciendo que los vasos sanguíneos se dilaten y nos sintamos mareados y cansados.

Contra todos esos síntomas molestos de la resaca existen remedios para poder así evitarla.

• Beber mucha agua para mantener el cuerpo hidratado

• No tomar alcohol con el estómago vacío: si no tenemos comida en el estómago, el alcohol pasará mucho más rápido al intestino delgado y será absorbido por el torrente sanguíneo.

• No mezclar y beber muy poco a poco: lo peor es mezclar alcoholes de diferentes graduaciones, así como beber mucho en un lapso de tiempo muy breve.

Todos los remedios tratan de calmar los síntomas que provoca la ingesta de alcohol que más allá de los físicos también se presenta a veces en forma de depresión y ansiedad. El organismo tiene que habituarse al tóxico para poder así eliminar todo resto que quede en el cuerpo en un tiempo entre 12 y 24 horas tras beber. No todos los metabolismos procesan por igual el alcohol y el efecto de la resaca varía de una persona a otra. Aspectos como la edad, el sexo, el estado físico e incluso la etnia determinan cuánto durará la resaca e incluso si se produce ya que el responsable de la misma no es el alcohol sino las sustancias que el cuerpo produce para eliminarlo del organismo. El acetaldehído provoca los mareos y náuseas e incluso el nerviosismo típico en alguien que ha bebido.

Quien más y quien menos ha probado los remedios más rocambolescos para combatir la resaca: comer huevos, beber en pajita, tomar vitaminas e incluso medicamentos antes de beber. Ninguno de ellos es efectivo ya que según los expertos se trata de mitos fundamentados en una lógica que se aleja de la ciencia. Lo que sí está probado es que existen bebidas que pueden provocar más o menos resaca en función del grado de alcohol e incluso del grado de azúcar ya que personas que refieren peor malestar cuando toman alcohol más dulce. También es posible que las bebidas alcohólicas de color oscuro produzcan más resaca debido a su alto valor en congéneres o sulfitos como el caso del vino el cual afecta a las personas más sensibles a este tipo de sal. Sea como fuere, lo mejor para evitar la resaca es no consumir alcohol.