Los vecinos de Cabueñes piden «aparcamientos disuasorios»

Las insuficientes plazas disponibles, principalmente en el hospital, hacen que muchos usuarios opten por el aparcamiento de pago del tanatorio, tal y como avanzó ayer EL COMERCIO, pero otros terminan «en la caleya que rodea el hospital, lugares que no son aptos, sobre todo el camino, que impide el paso».

Esta situación afecta a los vecinos de la zona que deben sortear estos vehículos, «el paso está interrumpido». Si bien en el camino que va hacia Somió es más ancho y «no impide la visibilidad», en el que va «hacia la iglesia de Cabueñes» surge la problemática. Sobre todo cuando se trata de vehículos grandes como furgonetas de reparto, «de vez en cuando se organizan atascos cuando se cruzan dos coches». Como usuarios del hospital, «nos pasa como cualquier ciudadano de Gijón: no hay donde aparcar».

La asociación de la zona rural Les Caseríes apunta a la necesidad «de más líneas y constancia en el transporte público», explica su presidente, Miguel Llanos. Los vecinos de parroquias alejadas del centro y que tienen «que ir a esa zona a las ocho de la mañana no pueden usar el transporte porque no se llega y si es a las doce, tienes que salir a las ocho de la mañana», ejemplifica. Bajo este argumento, reclama la necesidad de más aparcamientos, «los necesitamos más que nadie, para nosotros son imprescincibles».

Con la anterior corporación, la asociación rural ya había tratado el tema de «poner aparcamientos disuasorios con alguna prioridad para la zona rural». Llanos entiende que «igual no compensa, por eso pedimos algún tipo de alternativa o transporte a la demanda».