Urbanismo confía en tener concluida a final de año toda la tramitación del hospital Quirón

En la Comisión de Urbanismo el cambio del PGO obtuvo dictamen favorables con el rechazo de IU y Podemos, grupos que tradicionalmente han sido críticos con este proyecto sanitario de gestión privada, pero la sorpresa fue la abstención con reserva a Pleno de los socialistas. No obstante, el concejal de este grupo, Constantino Vaquero, explicó que por su parte el miércoles el voto será al 100% afirmativo, ya que fueron ellos en el mandato anterior quienes suscribieron el convenio con el Grupo Quirón para permutar las fincas municipales del grupo privado por otras municipales en Nuevo Gijón. En cuanto al sentido de su pronunciamiento en la comisión, Vaquero indicó que solo responde a su deseo de tener más tiempo para analizar la voluminosa documentación incluida en el estudio ambiental estratégico.

La modificación puntual del PGO que se llevará al Pleno ordinario del próximo miércoles afecta a dos parcelas de Nuevo Gijón con una edificabilidad de 31.789 metros cuadrados, que estaba previsto que se destinasen a equipamientos dotaciones públicos y que con el cambio del PGO pasarán a acoger un equipamiento privado. Se trata de antiguas parcelas municipales que el Ayuntamiento permutó en el anterior mandato por otras que había adquirido el Grupo Quirón en Cabueñes y que son necesarias para que las obras de ampliación en curso del hospital no se vean interrumpidas.

El presupuesto municipal aprobado para este año incluye en su previsión ingresos por el cobro del Impuesto sobre Construcciones (ICIO) a IDCQ Inmuebles Hospitalarios Gijón, la sociedad vinculada al Grupo Quirón que promueve este proyecto. Sobre este aspecto incidieron ayer los ediles de IU y de Podemos, Javier Suárez Llana y Olaya Suárez respectivamente, al señalar que sin inicio de obras este año no se podría cobrar el tributo.

Tanto la modificación del Plan General vigente como el convenio suscrito con Quirón están pendientes de sendos pleitos contenciosos interpuestos por la Corriente Sindical de Izquierdas (CSI) a través del abogado Marcelino Abraira.