Sobresaliente para la gestión de la EPI

La Escuela Politécnica de Ingeniería de Gijón es el primer centro de la Universidad de Oviedo en conseguir la certificación de calidad Audit. El programa -uno de los nueve, de carácter voluntario, de la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y la Acreditación (Aneca)- 'examina' a las facultades en un sentido amplio, desde las titulaciones hasta los laboratorios, la dirección y servicios como la administración y el apoyo y orientación al alumnado, entre otros criterios.

Lo detalló ayer el director de la escuela, Juan Carlos Campo, en Oviedo, donde se dio a conocer la consecución de este nuevo sello, orientado a conseguir una «gestión profesional del centro». «Todos los elementos -añadió- tienen que funcionar como agentes engranados».

Para esta evaluación y entre otras actuaciones, la Aneca mantuvo reuniones con el centro y con sus grupos de interés, como fue el caso del alumnado. «Los estudiantes valoraron de forma muy positiva la formación recibida y la orientación que les ofrecen sus profesores», indicó Campo, quien destacó «este mensaje positivo porque la EPI es un centro donde hay muchos suspensos».

Todo comenzó en 2009, cuando la EPI se puso manos a la obra para diseñar un sistema de gestión que después pondría en funcionamiento para poder así solicitar esta certificación. «Es el primer centro de la Universidad de Oviedo que obtiene este certificado», subrayó el rector de esta institución académica, Santiago García Granda. Al ser pionero en conseguirla, la vicerrectora de Acción Transversal y Cooperación con la Empresa, Eugenia Suárez, destacó el «esfuerzo» realizado y añadió que esta experiencia «va a repercutir en que más centros se animen a adquirir esta certificación». De hecho, la Escuela de Marina Civil y la Facultad de Comercio, Turismo y Ciencias Sociales ya están trabajando en esta línea para, después, solicitar el Audit.

Entre las ventajas que ofrece esta certificación para la EPI se encuentra el acceso a la acreditación institucional, que permitirá reducir la burocracia, entre otras actuaciones. Para conseguirla, además del Audit, se precisa tener la mitad de las titulaciones acreditadas y, en el caso de la EPI, «lo están todas», aseguró Juan Carlos Campo. En la presentación estuvieron también Antonio Calleja, subdirector de Calidad y Coordinación Docente de la EPI y su antecesora en el cargo, Susana Loredo. Por parte de la Universidad de Oviedo, acudieron la directora de área de Calidad, Pilar González, y Alberto Álvarez, responsable de la Unidad Técnica de Calidad.