Sanz Montes, sobre los incidentes en Valencia: «Puedes entender que la crispación y el dolor generen este tipo de reacciones»

El arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, aseguró esta tarde en Gijón, a propósito de la secuelas de la DANA que ha asolado Valencia, que «todos estamos conmovidos por esta situación tan sin cita previa que ha roto tantas cosas y en la que tantas personas se han quedado sin nada, porque se han quedado sin nadie». El prelado reflexionó en voz alta sobre los incidentes de este domingo en el municipio valenciano de Paiporta. en que los se vieron envueltos las máximas autoridades del Estado y dijo que «aunque no son loables y no me han gustado, puedes entender que la crispación y el dolor puedan generar reacciones como las que vimos».

Sanz Montes, que visitó esta tarde las instalaciones del Real Grupo de Cultura Covadonga, animó a empatizar con los damnificados de la riada y a ser conscientes de lo mucho que han perdido. «Un rito como irte a lavarte los dientes, ducharte cuando sales de la cama, tomar un cafetín a media mañama, sentarte a comer con tus amigos, ir a por un libro de tu estantería, ver el álbum de tus fotos... Todo eso ha quedado destruido para tanta gente. Y eso supone que de la noche a la mañana te encuentras a la intemperie más terrible sin saber dónde vas a dormir, dónde vas a comer y dónde están los tuyos», expresó el arzobispo. «Eso genera una tristeza y una violencia interna cuando el miedo te acorrala», abundó. «Detrás de las reacciones que ha habido hacia Su Majestad el Rey, la Reina, el presidente de la autonomía y el presidente del Gobierno, que no me han parecido bien, hay mucho dolor y cuando te sientes desamparado pudiendo haberse hecho otra cosa o cuando ves que se utiliza una tragedia de ese calibre para otra cosa te rebelas de una manera como hemos visto ayer», indicó Sanz Montes.

El arzobispo de Oviedo opinó que llegados a este punto «lo importante es arrimar el hombro, compartir solidariamente como estamos haciendo también desde la Iglesia asturiana a través de Cáritas, y ayudar a aquella gente a reconstruir cuanto antes una vida demasiado rota».