«Nos tienen que arreglar la boca, cada día está peor»

El encuentro tuvo lugar tan solo un día después de que la Policía Nacional practicase por segunda vez un registro en la nave de la clínica en Tremañes, en esta ocasión, para hacer acopio de los equipos informáticos y realizar un inventario del material sanitario con el que se pretende cubrir parte de la responsabilidad patrimonial a la que previsiblemente deberá hacer frente la empresa, acusada no solo de estafa, también de mala praxis con los clientes.

En Asturias hay más de setecientos afectados. Prácticamente todos ellos tienen los tratamientos inconclusos. «Hay casos muy graves, personas a las que les extrajeron todas las piezas dentales, nunca les llegaron a poner los implantes y solo pueden comer purés y líquidos, es una desgracia», explican desde el colectivo de perjudicados.

Su demanda más urgente es que las administraciones públicas «se hagan cargo cuanto antes del coste de los tratamientos». Al Principado, según cifró el consejero de Sanidad, le supondría un desembolso de tres millones de euros. «Somos gente sin recursos que no nos lo podemos costear de nuestro propio bolsillo. Si la Administración les dio los permisos a esos estafadores para que campasen a sus anchas, ahora tienen que asumir las responsabilidades», opinan los damnificados.