Las enfermeras del Hospital de Cabueñes salen a la calle para denunciar su «situación límite»

Medio centenar de enfermeras del Hospital de Cabueñes se concentraron este lunes a las puertas de las instalaciones para denunciar su «situación límite». Al grito de «no es trabajo, es esclavitud», las profesionales quisieron visibilizar la sobrecarga de trabajo que sufran como consecuencia de la escasez de personal.

La delegada de la Corriente Sindical de Izquierdas (CSI) en la Junta de personal, Elena Pérez, señaló que «llevamos muchos años con déficit de personal y ahora estamos en los mínimos establecidos». Según explican, si de forma habitual los estándares establecen nueve pacientes por enfermeras, actualmente, en Cabueñes, se está en 15-16 ingresados. Esto hay que calcularlo, además, con la actualización del hospital de ayer. A primera hora había 338 pacientes, y la UVI tenía 10 ingresos. A esto también hay que sumar, según cuenta, todos factores más como son los periodos vacacionales, y otro directamente relacionado: las bolsas de trabajo a cero. O sea, las enormes dificultades para encontrar personal con el que cubrir los puestos libres. No solo por vacaciones, también por enfermedad o cualquiera otra incidencia. «Si no pusiste solución en su momento, ahora es muy complicado», prosigue Elena Pérez, para quien la raíz de ese problema está en que «la gente que bien formada no quieren estar aquí porque no se siente bien tratada, y acaban yéndose fuera, incluso aunque tengan que hacer kilómetros de autopista a diario». La situación se ha ido agravando los últimos meses con bajas por ansiedad entre el personal.

Lo que coincidían los que se dieron cita frente al hospital de Cabueñes es que ahora no se sienten tratados con la dignidad que merecen tras haber pasado dos años luchando contra la panemia. «Son muchos meses de cansancio acumulado para que ahora nos pidan que vengamos en nuestros descanso. En algunos casos no queda otra, si no te llega el cambio...», explica la representante de la CSI.

Yendo a lo concreto este sindicato afirma que en lo que va de 2022 hay enfermeras que acumulan ocho carteleras diferentes, trabajando en el mismo servicio y en el turno, simplemente con los movimientos de los descanso. Por ello, piden «organizar en el largo plazo para tener visión de futuro».

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