El 'fitness' coge fuerza en el Grupo

Esta nueva fórmula es la creación de un bono verano. Corripio explicó que «cada socio podrá organizar su propio entrenamiento y se añaden nuevas actividades como la zumba y el combat training», hasta llegar a un total de once disciplinas. Este bono está dirigido a los socios adultos, pero el presidente es consciente de que «los jóvenes de entre 16 y 23 años se suelen desenganchar de la práctica del deporte. Por eso, hemos creado un bono joven con el que podrán participar, además de en las actividades de adultos, en otras específicas para ellos, como squash, musculación, escalada y artes marciales tradicionales».

Además, los jóvenes contarán con importantes descuentos. Una novedad a resaltar es que para gestionar las actividades que se quieran practicar se habrá de utilizar la aplicación móvil del club y será posible apuntarse a una hora y día en concreto con solo quince minutos de antelación.

Antonio Corripio apuntó que durante los meses de julio, agosto y septiembre habrá no solo los habituales cursillos de las distintas disciplinas deportivas que se practican en el Grupo, sino que se añaden otras que cada vez están cogiendo más importancia en el club o que tradicionalmente no se incluían en la lista de cursillos, como el patinaje, la escalada, el squash y el voleibol.

Otra novedad de la que pueden disfrutar ya todos los grupistas es la incorporación de una zona de entrenamiento funcional, inaugurada en el gimnasio la semana pasada, y que «podrá estar supervisada por un monitor que estará en la sala, para dirigir al deportista».

En verano también se dispondrá de un gimnasio al aire libre. Felipe Sánchez explicó que «se trata de combinar el trabajo aeróbico con el trabajo de esfuerzo al aire libre». Se podrá realizar tanto en Las Mestas -junto al campo de hockey- como en Mareo, completando los circuitos de crosstraining y de running. En este punto, otra aplicación móvil sobre rutinas deportivas es fundamental para que el socio saque el máximo rendimiento a este programa.

El 6 de junio comienza el plazo para las inscripciones en los cursillos e incluso no se descarta que alguna actividad se pueda hacer en la sede de Begoña. Beatriz Fernández puso énfasis en que «son actividades de todo tipo, desde danza hasta aeróbicas o cardiovasculares. A veces, la gente no sabe a qué va y así les podemos dirigir un poco».

Tal cantidad de cursillos no supondrá una merma de espacios para el resto de los socios. Al contrario. Nacho Aybar apunta que «el socio tendrá a su disposición más espacios, porque en verano los huecos están más disponibles. Lo que tratamos de hacer es aprovechar mejor las instalaciones que tenemos».

Con esta programación, Antonio Corripio está convencido de que «estamos colocando al Grupo a la vanguardia de las instalaciones deportivas».