Prisión provisional sin fianza para los dos acusados de apuñalar a tres hombres en Gaspar García Laviana

El Juzgado de Instrucción número 3 de Gijón ha dictado esta mañana un auto de prisión provisional, comunicada y sin fianza para los dos acusados del cuádruple apuñalamiento cometido en la madrugada del pasado 7 de enero a la salida de un local hostelero ubicado en la avenida de Gaspar García Laviana.

La Policía Nacional detuvo este martes a dos hombres, un joven argelino de 22 años y un marroquí de 20, como presuntos autores de la agresión, que se saldó con otros tres hombres heridos por arma blanca. El Ministerio Fiscal considera que existe riesgo de fuga en los dos detenidos, ambos en situación irregular en España, y riesgo de reiteración delictiva.

La Fiscalía, sin perjuicio de que esta calificación pueda modificarse a lo largo del procedimiento, considera que los hechos podrían ser constitutivos de tres delitos de homicidio en grado de tentativa y uno de lesiones agravadas.

Los hechos ocurrieron alrededor de las siete de la mañana en la confluencia de Gaspar García Laviana con la calle Leoncio Suárez, cuando los presuntos autores se encontraron con los agresores en las inmediaciones de otro pub nocturno que se encuentra junto al número 71 de la avenida.

I. V. G. y D. G. M. fueron apuñalados en el cuello y los hombros. La peor parte se la llevó el tercero de ellos, M. A. F. N., de 42 años, que recibió cuatro puñaladas en la espalda y tuvo que ser trasladado al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), con heridas de carácter grave.

A raíz de las declaraciones de víctimas y testigos, así como la investigación efectuada por la Policía Nacional, permitió la identificación de los presuntos agresores y su posterior detención.

Por su parte, los propietarios de negocios de la parte final de la avenida Gaspar García Laviana, reconocían ayer mismo estar «hartos» de una situación que se está volviendo ya recurrente en la zona. «Estas peleas nos hacen daño al resto», precisaba uno de los trabajadores de la calle, mientras un vecino de la zona reconocía que era habitual encontrarse «vasos rotos y manchas de sangre» en las puertas del local del que salieron los agresores la madrugada de los hechos.

La situación ha causado un gran revuelo entre los vecinos y propietarios de negocios de la zona, quienes aquejan que «el barrio se está degradando» y solicitan mayor vigilancia ante la creciente inseguridad del barrio, según manifestaron desde la asociación de vecinos Fumeru-El Llano.

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