Prisión por disparar por la ventana con una escopeta de perdigones

La Sección Octava de la Audiencia Provincial ha ratificado la condena de tres años y seis meses de prisión para un hombre que disparó desde su ventana una carabina y alcanzó a una adolescente que caminaba por la calle.

Los hechos tuvieron lugar en junio de 2018 en la calle Álava, en el barrio de Pumarín. La chica transitaba por la acera cuando de pronto sintió un fortísimo dolor en una pierna. En un primer momento, la víctima no se percató de lo que estaba ocurriendo, hasta que empezó a sangrar de forma abundante y se dio cuenta que la habían disparado, un extremo que fue confirmado por los facultativos sanitarios que la atendieron en el hospital.

La menor tuvo que ser intervenida quirúrgicamente para extraerle el proyectil, insertado en una zona muscular muy próxima al fémur. Permaneció varios días hospitalizada.

La investigación que posibilitó la detención del luego procesado fue realizada por la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Comisaría de Gijón. El punto de partida fue determinar la dirección seguida por el proyectil y así acotar las posibilidades de su origen. Gracias a la colaboración de testigos, vecinos y comerciantes del barrio, así como la trayectoria de otro balín que había impactado en una ventana cercana, los agentes pudieron precisar el edificio del que había salido el disparo: el número 5 de la calle Álava.

El individuo entregó de forma voluntaria el arma, una carabina Gamo Delta, de aire comprimido y características profesionales. Disparaba proyectiles de calibre 4.5 mm a una velocidad de 160 metros por segundo. Su precio de mercado, unos 70 euros, lo sitúa como un mosquetón asequible dentro de la categoría avanzada de armas de este tipo.

El tribunal de la Sección Octava de la Audiencia Provincial ha desestimado el recurso presentado por el condenado y confirma la sentencia de primera instancia. La víctima estuvo representada por la abogada Sylvia Garrido.