El Principado estima que la estación ganaría un 9% de usuarios en el museo por su centralidad

El Principado «no ve mal» el cambio y buscará el consenso «más amplio posible», según el presidente Adrián Barbón. En enero, la misma administración cerró un borrador de 'Plan para la movilidad multimodal en el área metropolitana de Asturias 2018-2030'. El documento está en fase de información pública y pone números al museo.

Lo hace al analizar qué resultado darán algunas de las actuaciones incluidas en el Plan de Infraestructuras y Movilidad previo, el 2015-2030. De aquel trabajo dice que hizo «diferentes estimaciones en función de un posible alargamiento de las líneas actuales de Renfe y/o Feve», concluyendo que lo mejor es que sea la línea C1 la que penetre en el metrotrén.

«Por otro lado, se prevé localizar la nueva estación intermodal más cerca del centro, lo que supone una mayor accesibilidad a las zonas de atracción de viajes», asume. «Así, se obtiene una variación de la demanda tanto por la modificación de la localización de la estación intermodal, como por la implantación del metrotrén», describe.

«La nueva ubicación de la estación intermodal se introduce en el modelo y se observa un incremento de la demanda en esta estación del 9%, que proviene mayoritariamente del vehículo privado (85%) y el resto del autobús interurbano», sostiene el documento del Principado.

Luego, el trabajo analiza la demanda propia del metrotrén y dice que si bien el plan 2015-2030 estimaba que atraería a 7.069 nuevos viajeros diarios al tren, ese habría sido un cálculo basado solo en los usuarios de fuera. Al sumársele los desplazamientos que los gijoneses harán por la ciudad aprovechando el metrotrén, el modelo seguido en el plan autonómico eleva a 11.800 los nuevos usuarios.

Preguntada ayer al respecto si estas cifras no suponen un aval para la ubicación junto al museo, desde la Consejería de Infraestructuras responden que el plan «no ha entrado a comparar ubicaciones» para la estación intermodal. La mejora que se atribuye en el transporte público de optar por el museo se habría calibrado en realidad «comparándolo con el tráfico de la actual estación de Sanz Crespo».

Ese 9% de mejora atribuido al plan de vías sería, además, «por la doble condición conjunta de apertura del metrotrén y posible estación en el museo frente a la estación actual, sin metrotrén», indican desde la consejería. Es un argumento según el cual la inversión que se plantea tendría un rédito escaso. Por comprar, en 2010 las estaciones de El Humedal, Jovellanos y La Braña captaron 2,4 millones de viajeros de cercanías; en 2012, primer ejercicio completo con Sanz Crespo, fueron 1,7. Es decir, retrasar 800 metros la parada supuso una mengua de viajeros del 25,8% en dos años.

Aclarar el potencial que para el transporte público tienen Moreda y el museo es clave, no solo para tomar la mejor decisión. La operación se quiere financiar con un préstamo del Banco Europeo de Inversiones, institución que exige se le presenten esos números en un estudio de viabilidad socioeconómica. El trabajo que el ministerio acaba de cerrar no desarrolla el tema, pero ve «posible que a nivel socioeconómico» la alternativa del museo «sea ligeramente preferible (dado el emplazamiento de la estación en relación a la centralidad)». El plan de movilidad autonómico habría dejado una comparación indirecta: reconoce que frente a Sanz Crespo el museo está «más cerca del centro, lo que supone una mayor accesibilidad a las zonas de atracción de viajes». Cabe recordar que el edificio de Moreda se pretende levantar colindando al de Sanz Crespo.

El concejal Rubén Pérez, de Ciudadanos, advirtió ayer al equipo de gobierno municipal de que la extinción del actual convenio del plan de vías para negociar uno nuevo con otra ubicación «necesitaría una mayoría plenaria no tienen». Explicó que la firma de un documento de estas características necesita autorización del Pleno, por lo que para cambiar el proyecto «no bastaría con que lo acuerde el consejo de administración de Gijón al Norte».

Por su parte, el portavoz autonómico de Foro, Adrián Pumares, anunció la presentación en la Junta General del Principado de una proposición no de ley para que el parlamento regional defienda el proyecto acordado en el convenio. «En un momento en el que la ciudadanía exige consensos, porque dan certidumbre, debe defenderse uno que fue tremendamente difícil de lograr desde el punto de vista político y técnico, pero que dotó a Gijón de un proyecto de ciudad que aseguraba una inversión pública de primera magnitud».