El Principado abrirá este mes en la Casa del Mar un centro para jóvenes inmigrantes

Los jóvenes seleccionados para participar en este programa son 16 y se irá produciendo una incorporación progresiva a su nuevo hogar durante un periodo de tiempo. Compartirán sexta planta con la hospedería para marinos, aunque los nuevos inquilinos contarán con un espacio diferenciado en un ala que hasta ahora se encontraba sin uso y que se ha adecuado para desarrollar este proyecto. El acceso al nuevo centro se hará a través del salón de la propia hospedería.

Según explicaron a El COMERCIO fuentes de la consejería, para poder acceder a este proyecto de transición a la vida adulta su trayectoria durante la minoría de edad en centros de protección de menores ha tenido que ser ejemplar, tanto a nivel de convivencia, como de adaptación social y de aprovechamiento de la formación que se les ha ofrecido.

También se pone de relieve, desde el Principado, que ninguno de los beneficiarios de este proyecto tiene ni puede tener, para permanecer en el programa, antecedentes delictivos ni haber participado en conflicto alguno en sus centros de procedencia.

Además, en lo sucesivo, una vez que entren a vivir a la Casa del Mar, también tendrán que mantener su historial inmaculado. Cualquier conflicto en el que puedan participar dentro o fuera de la Casa del Mar, sea de índole penal o no, y cualquier falta en el cumplimiento de los compromisos adquiridos, conlleva la expulsión inmediata del centro de La Calzada y del proyecto.

El perfil de los 16 jóvenes que pasarán a la Casa del Mar es, como queda dicho, de jóvenes inmigrantes mayores de edad que han sido tutelados como 'menas' cuando eran menores. En principio, los seleccionados para este programa concreto son de origen marroquí, magrebí, subsaharianos y un pakistaní.

El proyecto que se va a desarrollar en la Casa del Mar se llama 'Villa Mar' y replicará un programa que ya está acogiendo a otros chicos de similares características que actualmente están distribuidos en pisos tutelados en Gijón, aunque también hay algunos residiendo en Oviedo. La apertura de este nuevo centro se está llevando a cabo con absoluta discreción. Ni los conserjes del edificio de la Casa del Mar ni en el Ayuntamiento era conocedores de esta nueva instalación. Ayer jueves comenzaron a meter los muebles y equipamiento para los futuros usuarios. Estas labores continuarán durante la próxima semana y ya a finales de ella, o ya en la siguiente, empezarán a entrar los chicos participantes en el programa de forma paulatina. No está aún cerrado el dato del personal necesario para el seguimiento de estos jóvenes.

La presidenta de la Asociación de Vecinos Alfonso Camín de La Calzada, Teresa Prada, pide que al Principado que «se lleve un control exhaustivo, ya que estamos en una zona y un barrio donde, por desgracia, la conflictividad y los problemas de seguridad están a la orden del día». «Esperamos que al convivencia sea adaptativa y sin problemas. Siguiendo por todas las partes las reglas de convivencia, seguro que no habrá ningún problema», manifestó.

Con la apertura de este centro para jóvenes inmigrantes siguen aprovechándose espacios ociosos que quedaban en este edificio propiedad del Principado. En el inmueble están distribuidas entidades tan dispares como Gijón al Norte y Renfe (séptima planta), la Delegación del Gobierno en Asturias (tercera), la hospedería y el nuevo centro (sexta) y las oficinas de FCC (cuarta). Además, dos plantas y media están ocupadas por el Sespa para especialidades del Hospital de Cabueñes. Permanece vacía la quinta planta donde hubo hace años una residencia de estudiantes.