Paula Domenech es la nueva secretaria comarcal de Gijón y de Igualdad de la Unión GC de Asturias, la asociación que defiende los derechos profesionales ... y sociales de los guardias civiles. De origen madrileño, lleva quince años en el instituto armado «por vocación», cuatro de ellos destinada en la Comandancia de Gijón.
-¿Cómo está la mujer en la Guardia Civil?
-Se ha mejorado mucho en los últimos años, pero no lo suficiente. Desde que yo ingresé en la Guardia Civil en 2006 he notado muchos cambios a positivo, pero quedan cosas por hacer.
-Por ejemplo.
-Sobre todo en materia de conciliación. Ahora mismo no tenemos turnos estipulados, por lo que es muy complicado organizarse para el cuidado de niños o familiares. Actualmente solo podemos organizarnos de mes a mes, pero lo que necesitamos es tener una organización predefinida como sí la hay en otros cuerpos como la Policía Nacional y las policías locales. Hay un proyecto para ponerlo en marcha, pero aún no ha entrado en vigor y eso nos facilitaría mucho poder conciliar.
-Piden también permisos de asuntos propios objetivos. ¿A qué se refieren?
-A que la licencia de asuntos propios a la que tenemos derecho no esté supeditada a un informe del jefe de la unidad, que la puede denegar por demanda del servicio. Esto influye tanto a hombres como a mujeres. Nos beneficiaríamos todos si el permiso, que no es retribuido, fuera objetivo, es decir, tuviera criterios generales y no dependiese de cada jefe en particular. Otra de nuestras reivindicaciones pasa por conseguir que la excedencia para el cuidado del menor de 12 años se amplíe en edad por lo menos hasta los 14.
-¿Aprecia algún trato diferente a nivel laboral por ser mujer?
-No, en la comandancia de Gijón no, no noto ninguna distinción, al contrario, siempre he sentido y me han hecho sentir que hay una equiparación con el trabajo de los compañeros hombres.
-¿Y anteriormente?
-Con 20 años fui la primera mujer escolta de una empresa privada en Navarra y ahí sí. Estaba empezando y me tocaba trabajar como escolta de un juez y tuve que demostrar que valía para ello, cuando a lo mejor a un compañero no se le ponía en duda. Pero yo soy de la opinión de que querer es poder y que a día de hoy, hablo de la Guardia Civil, las mujeres pueden acceder a todas las especialidades. No hay ninguna a la que no podamos optar.
-Sin embargo, hay todavía pocas mujeres en los escalafones más altos.
-Llegará una equiparación real con el tiempo. Hay que tener en cuenta que la Guardia Civil es un cuerpo que tiene 125 años y que las mujeres no pudieron acceder hasta 1988. Hay que dar tiempo a que se vaya consiguiendo ascender y llegar a los mismos puestos de responsabilidad. También es verdad que hasta hace poco tiempo quizás el papel de la mujer en la Guardia Civil no había llegado tanto a la ciudadanía. Ahora cada vez va calando más y llegando a más gente. Me gustaría que hubiera vocación y que consiguiéramos llegar a la gente joven.