Secciones
Servicios
Destacamos
IVÁN VILLAR
GIJÓN.
Martes, 25 de mayo 2021, 02:31
El Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) y el Impuesto sobre el incremento de valor de los terrenos de naturaleza urbana, más conocido como impuesto de plusvalía, sufrieron la mayor caída de recaudación durante el año de la pandemia, según recoge la Cuenta General de ... 2020 del Ayuntamiento de Gijón, que hoy se presentará en comisión especial. El primero de estos impuestos, que representa la principal fuente de financiación de las arcas municipales, vio cómo la cifra correspondiente a bienes de naturaleza urbana bajaba de los 65,5 millones de euros de recaudación neta en 2019 a 62,2 millones el año pasado, lo que supone un descenso de casi un 5%.
El IBI que pagan los bienes rústicos, por su parte, reportó al Ayuntamiento un 26% menos de dinero que el año previo, pasando de 762.000 a 559.000 euros. El de bienes de características especiales -aplicable a instalaciones como el Puerto, la térmica y el embalse de San Andrés- sí aumentó su recaudación, de 976.000 euros a 1,2 millones, que suponen un 22,9% más. La razón hay que buscarla en la subida del tipo impositivo que se aplicó en 2020 a estas propiedades, que pasaron de tributar a un 0,6% a hacerlo al 0,79%, el mismo tipo que también se planteaba para el denominado 'IBI para ricos' que finalmente quedó en suspenso a raíz de la crisis.
La segunda gran caída fue la del impuesto de plusvalía, una figura que suma a los efectos propios de la pandemia, con su afección sobre la compraventa de inmuebles, los de las dudas legales con respecto a la pertinencia de su cobro cuando no se han registrado incrementos de valor en la propiedad objeto de tributación. Si en 2019 la recaudación neta procedente de estas operaciones había sido de 10,5 millones de euros, en 2020 la cifra se redujo un 28%, hasta quedar tan solo en 7,6 millones. A este dato se llega después de haber descontado de los 8,4 millones que se recaudaron realmente devoluciones por un importe de 814.354 euros. Y ni siquiera son todas las reconocidas a contribuyentes a los que se ha dado la razón en su reclamación contra el pago de este impuesto, pues a 31 de diciembre aún estaban pendiente de pago otros 108.592 euros también correspondientes a devoluciones.
En el impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras -directamente vinculado a una actividad en el sector de la construcción que no fue ajena a los momentos más críticos del confinamiento- del repunte que se había registrado en 2019 tras la aprobación del nuevo Plan General de Ordenación, y que elevó la recaudación neta por este concepto hasta los 3,8 millones de euros, se ha pasado a una caída del 8,4%, con 3,5 millones.
Sí ha aumentado la recaudación vinculada al impuesto sobre los vehículos de tracción mecánica (viñeta), que en 2020 reportó a las arcas municipales 11,3 millones de euros, un 5,7% por encima de los 10,7 millones de 2019. Y también la del impuesto sobre actividades económicas, en su caso un 11,2%, de 9,3 a 10,3 millones de euros. Por IVA se ingresaron 5,5 millones de euros, 313.000 más que el año anterior.
En el apartado de tasas, la mayor caída correspondió a las que se cobran por el uso del espacio público a empresas explotadoras de servicios de suministros. De 5,5 millones de euros en 2019 se pasó a 4,4 el año pasado. Y la exención durante todo el año de la tasa por la instalación de terrazas de hostelería privó al Ayuntamiento de unos ingresos que el ejercicio anterior habían rondado el millón de euros. Por multas de tráfico, mientras, consta una recaudación de 2,4 millones de euros, que es un 7% menos que en 2019. Otros conceptos que supusieron menos recaudación que antes de la pandemia fueron el de concesiones administrativas, con 300.000 euros menos, y el de venta de terrenos, con 227.000 menos.
En datos globales, la cuenta general de 2020 recoge ingresos procedentes de impuestos por 113,1 millones de euros -frente a los 117 millones del año anterior-, mientras que los originados por el cobro de tasas se cifran en 7,9 millones -en contraste con los 10,3 de 2019-. El descenso lo compensa parcialmente el aumento de transferencias recibidas de otras administraciones, que pasaron de 76,8 a 80,5 millones de euros.
Los gastos aumentaron en 7,3 millones de euros, principalmente por el incremento de transferencias y subvenciones, que aumentó 12,4 millones. Otros gastos corrientes se redujeron, en 5 millones de euros.
Noticia Relacionada
Aunque en la liquidación del presupuesto consta un resultado positivo de 8,2 millones de euros y un ahorro neto también positivo de 7,1 millones de euros, la cuenta general que se presentará hoy presenta en rojo otra variable, el resultado económico patrimonial. Recoge una cifra negativa de 2,9 millones de euros, frente a la positiva de 8,5 millones de 2019, 10,3 en 2018 y 17,1 de 2017. El endeudamiento por habitante era al cierre del año de 443,31 euros, frente a los 439,86 de un año antes.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.