El plan del Muro convierte el 'cascayu' en un paseo verde

Para conseguir que el Muro se convierta en «un corazón cívico» y relegar al vehículo privado se creará un único carril de circulación cuyo sentido será enfrentado en la zona de Menéndez Pelayo. Es decir, el tráfico podrá acceder al nuevo vial del Muro tanto desde la avenida de Castilla como desde Eladio Carreño, pero en ambos casos finalizará desembocando en Menéndez Pelayo. Merced a esta ordenación la avenida de Rufo García Rendueles quedará exclusivamente como vial de servicio a las viviendas y comercios ubicados en esta calle, pero eliminando el tráfico de paso, al no poder recorrer el vial al completo en ninguno de los dos sentidos. También podrán circular por este vial los servicios de emergencia, el transporte público y servicios municipales como la recogida de basuras de Emulsa. Todo ello está previsto en el Plan de Movilidad , que también prevé que las calles Caridad y Ruiz Gómez serán de prioridad peatonal y tráfico restringido.

Según explicaron ayer los concejales de Obras Públicas, Olmo Ron, y de Movilidad, Aurelio Martín, el tráfico limitado de esta forma circulará por una calzada de plataforma única que generará una superficie continua para carril de servicio de 4,5 metros de ancho más un carril bici segregado de 2,5 metros. Un total de 7 metros de nuevo adoquinado con una pendiente máxima del 3% sin barreras ni desniveles verticales que, según destacaron los ediles, mejorarán la accesibilidad, la seguridad vial y la calidad del aire.

Los ediles Olmo Ron y Aurelio Martín aseguran que este diseño ofrece «versatilidad» y permitiría a un gobierno local posterior poner doble sentido si lo considerase necesario. En ese caso, habría que prescindir del carril bici y moverlo hacia el corredor verde que reemplazará al 'cascayu'. Ron aseguró ayer que esta actuación «está respaldada por la seguridad jurídica y el plan especial del Muro aprobado en 2004» pese a la sentencia del juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Gijón que obliga a revertir la obra del 'cascayu'. El concejal de Obras Públicas, que fue el pasado viernes el encargado de anunciar el recurso judicial contra el fallo que da la razón a Stop Muro, afirmó que la sentencia se refiere a «una intervención puntual en julio de 2020 y no tiene nada que ver con este proyecto de renovación de la fachada marítima». Martín indicó que este vial de servicio que se va a dejar para residentes y servicios coincide con el máximo de peatonalización que permite el plan especial del Muro.

El anteproyecto de remodelación integral prevé 'verdificar' el ámbito entre la iglesia de San Pedro y El Rinconín, un recorrido este-oeste de la costa de Gijón con una superficie aproximada total de 98.200 metros cuadrados.

La ambiciosa reforma del paseo se desarrollará en tres fases: del Campo Valdés al Náutico, del martillo de Capua a Rufo García Rendueles y del puente del Piles hasta el Rinconín. En esta última zona, en el entorno de 'las chaponas', habrá una actuación especial con una grada, zonas verdes y una instalación lúdica.

La propuesta de PSOE e IU prioriza que el peatón domine ese espacio del frente marítimo, aumentando los itinerarios peatonales. Se mantiene el paseo tradicional del Muro intacto por su carácter histórico y el 'cascayu' se convierte en un corredor verde de camino más sinuoso, con un ancho medio de 3,5 metros que va fluctuando a lo largo de su recorrido, relacionando la principal fachada marítima con la ciudad. Se aumentan las fachadas de los edificios hasta 6 metros y se despejan los flujos transversales con el objetivo de mejorar el tránsito peatonal y a su vez dar espacios a los locales comerciales en la acera para terrazas u otros usos.

A su vez, la intervención impulsa el uso de la bicicleta, aumentando metros de carril e incorporando estaciones de bici, aparcamientos y punto de reparación en la zona del Náutico.

Otra línea maestra es la 'verdificación' del paseo, extendiendo masivamente la vegetación y conservando el máximo arbolado existente. El anteproyecto recalca que la sostenibilidad medioambiental es la base del desarrollo de la infraestructura enfocada a la revitalización y protección de espacios públicos aportando bienestar y salud social.

La propuesta de reforma del Muro prevé también la creación de cuatro 'espacios de oportunidad', coincidiendo con plazoletas y espacios más amplios de la avenida Rufo García Rendueles: la plaza de la calle Caridad, la plaza de Las Anclas, la zona del actual edificio de Salvamento y la zona de la sede vecinal de La Arena. Para reactivar la vida social del Muro en este tramo del paseo se propone la instalación de juegos infantiles y terrazas de hostelería. En general, se pretende la renaturalización de todo el ámbito, dando así continuidad a la actuación llevada a cabo recientemente en la avenida de El Molinón hacia los barrios de La Arena y el centro.

Se eliminarán las pérgolas blancas y se mantendrán las de hormigón, al considerar que pueden dar mayor servicio a la playa. En el paseo tradicional solo está prevista la instalación de rampas en las escaleras 5, 11 y 14 en aras de mejorar la accesibilidad, para lo que habrá que tratar con la Demarcación de Costas, reacia a actuaciones que supongan ocupar más superficie del arenal.

Los pavimentos serán mixtos con adoquinado en el que pueda crecer zona verde en la junta. Respecto a la vegetación, Ron adelantó que debe ser resistente a la salinidad de la zona y se apuesta por mantener el mayor número de árboles actuales y jugar con tamaños y volúmenes. Para las terrazas hosteleras se propone que sean cubiertas y cerradas al menos por tres lados.