Peatonalizar Covadonga y crear cinco nuevos parkings, prioridades del Plan de Movilidad de Gijón

Aunque el plan tendrá una vigencia de 2023 a 2032, con un presupuesto de unos 70,5 millones de euros, se ha establecido un cronograma con las primeras actuaciones a llevar a cabo entre 2023 y 2025. Una de ellas es la peatonalización de la calle Covadonga entre el paseo de Begoña y la plaza de Europa. Seguirá el modelo de las peatonalizaciones ya efectuadas en el resto de esa calle y que «es el modelo que más gusta a la Unión de Comerciantes, porque además hace que se consolide un comercio especializado», explicó Aurelio Martín, quien recordó que en estas peatonalizaciones «se deja pasar, en mayor o menor medida, algún tipo de circulación». Sobre este nuevo tramo «se va a poner plataforma única. Hay muy pocos aparcamientos, con lo cual es fácil y está entre dos parkings, los de Begoña y la plaza de Europa. Esa es la siguiente actuación y hay que conectarla con la Plazuela y las calles Ruiz Gómez y Caridad», apuntó el edil. Sería el primero de los ejes peatonales Norte-Sur para conectar el Muro con el centro de la ciudad. En total, se prevé crear unos 20 kilómetros de calles peatonales y, por ejemplo, entre las últimas que se transformarán citó las de Mariano Pola-avenida de Galicia y plaza de Europa-playa de Poniente.

Pero hay otra relación de actuaciones para realizar en esta primera tanda. Hay algunas que cuyas obras está previsto que comiencen en enero, como la ecomanzana de La Calzada, los carriles bus de las avenidas de la Constitución y de la Costa, la primera fase de la reforma de la avenida de Pablo Iglesias y la puesta en marcha del nuevo sistema público de bicicletas, que deberá comenzar a funcionar en abril. Pero a estas hay que añadir otras obras importantes, como son el intercambiador y la rotonda de la plaza del Humedal, la plataforma única de Cimavilla, la reordenación de la calle de Anselmo Solar y los aparcamientos subterráneos de la plaza del Médico Félix Prieto, Cocheras y San Agustín, así como los disuasorios de la avenida de Portugal y de la Escuela Politécnica e Ingeniería (EPI), al lado de las facultades.

La línea estratégica del plan que más dinero destina es la de movilidad activa y saludable y la mejora del espacio público, con un 75% del conjunto de la inversión. Como se ha dicho, la inversión prevista por el Ayuntamiento es de 70,5 millones de euros de fondos propios, pero la llegada de fondos europeos o de aportaciones de otras administraciones hará minorar el esfuerzo económico que tengan que afrontar las arcas municipales. Así, por ejemplo, en esa cantidad total no está incluido el coste del aparcamiento disuasorio de la avenida de Portugal, que será financiado por el Principado a través de fondos europeos. Para el año 2023 «la inversión prevista del Ayuntamiento de Gijón es de 1,71 millones de euros y para el 2024 sería de 5,66. Eso está pendiente del resultado definitivo de algunas convocatorias de fondos a las que nos hemos presentado y que todavía no están resueltas por los ministerios», remarcó Aurelio Martín.

Puso como ejemplo una convocatoria del pasado mes de septiembre referente a la electrificación de las cocheras de EMTUSA, nuevos autobuses eléctricos y la plataforma única de Cimavilla. En sentido opuesto, el concejal explicó que actuaciones que ya han sido ejecutadas, como el carril bus de Gran Capitán y Brasil o el carril bici de Suárez Valdés se podrán beneficiar también de los fondos europeos, ya que son actuaciones en materia de movilidad cercanas a la convocatoria de las ayudas. «De los 27 millones de euros que tenemos de fondos europeos, una buena parte es para movilidad y renaturalización, no solo del Piles, sino de la ciudad. Ahí se va entre el 70% y el 80% de los fondos europeos», añadió el concejal.

El Plan de Movilidad, incluidas las modificaciones aprobadas tras las alegaciones presentadas en su tramitación, es un documento de unas 800 páginas. El objetivo del equipo de gobierno es que se pueda aprobar en el Pleno en el transcurso del próximo mes de febrero, pero Aurelio Martín no rechazó la posibilidad de que se pueda convocar un pleno exclusivamente para debatir este documento, a finales de febrero o principios de marzo.

El texto que se remite ahora al Principado ya ha sido revisado por la UTE que elaboró el plan, así como por los técnicos municipales del Ayuntamiento de Gijón.