A un paso del nombramiento ante la falta de más candidatos

Aún queda tiempo, hasta mediodía, para que haya más movimientos y que, finalmente haya una votación entre varias propuestas. Si no, Floro estará más cerca de convertirse oficialmente en el cabeza de lista para las elecciones municipales del 28 de mayo. No lo será automáticamente todavía porque, incluso si fuera la única opción, tendrá que recoger los avales necesarios para su candidatura. Estos son, el 12% como mínimo y el 15% como máximo de la militancia gijonesa. El censo que se toma que referencia es el actualizado a 1 de junio. En el caso de las recogidas de firmas era de 1.182, que ahora será algo más elevado al añadirse la afiliación directa y las Juventudes Socialistas.

A pesar de que hubo varios movimientos las últimas horas ninguna ha llegado a consolidarse. Echa para atrás el hecho de que Floro llegue con el aval unánime de la Ejecutiva local y con el impulso de buena parte de la militancia. Además, es un nombre que llega tras haber recogido 700 firmas que son las que han forzado esta votación. Aunque la FSA ya dejó claro el domingo que Floro es el candidato de la dirección local, no se va a impulsar nada desde allí. Tampoco los afines a Ana González parecen dispuesto a ir a otra batalla, una vez que se viene de un proceso que ha dinamitado el partido y devuelto al primero plano los enfrentamientos entre las distintas familias.

La reconciliación se intentará trabajar con vistas a dos citas próximas que tiene el socialismo gijonés. Por un lado en lo que se ha venido haciendo los últimos meses: la Conferencia Política que se quiere convocar a finales de otoño y que debería de servir de base para el programa electoral del año que viene; por otro lado, y ahí vendrá el siguiente pulso, con final aún incierto, es la elaboración en sí misma de la lista, que combine distintos perfiles y que sirva para llevar a la práctica esa palabra que tanto se usa en estos casos: integración.