IVÁN VILLAR
GIJÓN.
Jueves, 3 de marzo 2022, 00:39
La concejala de Urbanismo, Dolores Patón, anunció ayer en respuesta a una pregunta de Podemos-Equo la renuncia del equipo de gobierno a aprobar en lo que queda de mandato una nueva ordenanza de terrazas que sustituya a la de 2013. «Sería imposible tener ... la nueva ordenanza antes de que finalizase el actual mandato. Y no creemos responsable dejar tramitaciones a medias», indicó toda vez que ya queda poco más de un año para las próximas elecciones municipales.
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La edil justificó esta decisión tanto en el «largo proceso» que conlleva la redacción y aprobación de una norma de estas características, pero también en «los efectos aún latentes de la pandemia». Con respecto a la primera cuestión, explicó que «tras los contactos mantenidos con los diferentes agentes a los que habría que tener en cuenta a la hora de elaborar esta ordenanza» se ha llegado a la conclusión de que «el proceso de negociación sería largo» si lo que se pretende es lograr un texto de consenso en el que se vean representados los intereses de empresarios, vecinos y, entre otros colectivos, las personas con movilidad reducida. En cuanto a su referencia a la pandemia, Patón consideró que «estamos en un momento de reactivación y recuperación muy importante, tanto desde el punto de vista económico como el del empleo, y en estos momentos lo prioritario es focalizar todos nuestros esfuerzos en dar respuesta a las demandas que estamos recibiendo en ese sentido».
El presidente de la patronal Otea en Gijón, Ángel Lorenzo, remarcó que «con la pandemia, las terrazas han venido para quedarse». Y recordó que la asociación que encabeza «tiene entre sus objetivos el modificar algunos aspectos de la ordenanza actual para conseguir que sean más confortables para los gijoneses y los turistas que nos visitan y también más atractivas para la ciudad». Entre las propuestas que la entidad puso en los últimos meses sobre la mesa están la unificación de diseños en función de «la idiosincrasia de cada zona», así como la incorporación de herramientas que simplifiquen y agilicen la tramitación.
Lorenzo asegura que sigue habiendo «reuniones periódicas con el Ayuntamiento», en las que además «existe una buena sintonía». Y pese al anuncio de ayer de la concejala de Urbanismo, «seguiremos reuniéndonos para ver si algunos aspectos de la ordenanza se pueden modificar ya», aunque la aprobación de un texto íntegramente nuevo quede pospuesto para más tarde. «Es necesario, porque además para este verano esperamos mucha afluencia turística y el año que viene notaremos positivamente la llegada del AVE, con un turismo desestacionalizado de fin de semana».
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Para el presidente de la federación vecinal urbana (FAV), Manuel Cañete, «debe hacerse un debate sereno sobre el modelo y la ocupación del espacio público, porque entre las cosas que nos ha enseñado la pandemia está la importancia de disponer de lugares para la socializacion y la convivencia vecinal. Y el tema de las terrazas habrá que encajarlo en ese debate». Mencionó la necesidad de «rediseñar calles y ensanchar aceras, que en Gijón son muy estrechas. Y por supuesto, de garantizar que no habrá espacios invisibles ni intransitables». Remarcó cómo la crisis sanitaria mostró «la necesidad de ser flexibles, si hay compromiso de la hostelería, y de tener claro que en circunstancias especiales administración, vecinos y hosteleros deberíamos consensuar soluciones».
La portavoz de Podemos-Equo, Laura Tuero, consideró que «la nueva ordenanza debería realizarse lo antes posible aunque el equipo de gobierno aparque ahora el anuncio que hizo en varias ocasiones». Remarcó que el texto «ha de hacerse con la participación de vecinos y hosteleros y tiene que velar por un modelo de ciudad habitable y accesible para todo el mundo». Añadió que mientras no se actualice la normativa «es necesario hacer cumplir la actual, para que las calles y plazas sean espacios para todos, pensando en las familias con niños y personas con movilidad reducida».
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Rubén Pérez, de Ciudadanos, considera que el anuncio de Patón «es una muestra más de la falta de sensibilidad del gobierno local con el sector hostelero, porque han tenido tiempo más que suficiente para la reforma». Jesús Martínez Salvador, de Foro, apunta que «la pandemia no puede usarse como excusa para no hacer el trabajo. Y que no dé tiempo a elaborar una nueva ordenanza, no implica que no se puedan hacer modificaciones en la actual». Ángela Pumariega, del PP, cree que la nueva ordenanza «es importante y urgente porque es una forma de ayudar a la reactivación de la hostelería».
Para Eladio de la Concha, de Vox, la normativa vigente «se ha quedado obsoleta y urge una revisión a fondo». Y Alberto López-Asenjo señala que «se ha constatado una vez más la ineficacia de la administración municipal y la diferencia entre los grandes anuncios y la realidad de los hechos».
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La concejala de Urbanismo también anunció que el Ayuntamiento «ha iniciado un proceso de delimitación de los espacios destinados a terraza» mediante marcas en el suelo «para que tanto el personal de hostelería como la ciudadanía sean conscientes del espacio que les corresponde».
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