La avenida Rufo García Bernardo con sus tres usos para vehículos, bicis y peatones. ARIENZA

Otea apoya suprimir la mediana del Muro y que haya terrazas frente a los edificios

Urge consensuar un diseño para iniciar las obras «y que el próximo verano no siga dando una imagen de abandono y provisionalidad»

Iván Villar

Gijón

Miércoles, 12 de enero 2022, 03:21

La propuesta para el Muro de la Concejalía de Medio Ambiente y Movilidad, que como adelantó EL COMERCIO pasa por convertir toda la calle en una plataforma única que permita flexibilidad en lo que respecta al número de carriles, no disgusta al sector de ... la hostelería, que ve en la transformación de este espacio una oportunidad para revitalizar los locales de la zona. «Creemos que si se quitan los aparcamientos y la mediana hay ancho suficiente para convivir terrazas, zonas de descanso y juegos, zonas de paseo, carril bici y un carril de tráfico en cada sentido que se puedan dejar sin uso en días señalados», apunta el presidente de la patronal Otea en Gijón, Ángel Lorenzo.

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En paralelo al aumento de espacios peatonales, la generación de zonas estanciales y la reducción del uso del vehículo privado, uno de los objetivos que pretende el Consistorio con su intervención tanto en el Muro como en la fachada marítima de Fomento y Poniente es la reactivación económica de dos espacios que ocupan un lugar privilegiado de la ciudad. Y, en ese sentido, Aurelio Martín señalaba que entre las ventajas de la plataforma única -con aceras y calzada al mismo nivel- estaría la posibilidad de aumentar la superficie libre de coches en el lado de los edificios. «Esa acera tiene que ser más amplia para dar más vidilla comercial e incluso permitir terrazas cerradas», explicó el concejal. Una idea que coindencia plenamenta con las aspiraciones de la hostelería local.

«Desde Otea defendemos un aumento de la acera más próxima a los edificios que posibilite la instalación de terrazas permanentes y cerradas para dar servicio tanto a los paseantes como a quienes disfrutan de la playa. Harían más atractivos locales que llevan cerrados desde hace mucho tiempo». Lorenzo considera que, en la actualidad, el Muro «no es una buena calle para instalar comercios o locales de hostelería sin terraza». Y advierte de que «es urgente que se resuelva la polémica sobre la reforma y se acuerde un diseño en consenso, para poder iniciar cuanto antes la obras y que el próximo verano no demos en la zona más turística de Gijón una imagen de abandono y provisionalidad».

Los hosteleros también ven «ancho suficiente» para «un carril en cada sentido, que se pueda dejar sin uso en días señalados»

Más allá de la actividad hostelera, el objetivo del equipo de gobierno es que la reforma que se lleve a cabo en el Muro dé cumplimiento a todos los puntos que fueron objeto de consenso en el marco de la comisión creada el año pasado con representantes políticos, vecinos, empresarios, sindicatos, arquitectos e ingenieros. Entre ellos incluía como «acción prioritaria» la transformación de la acera situada en el lado de los edificios «en un espacio público que aproveche la existencia de locales comerciales con la disponibilidad de nuevos espacios públicos estanciales». También indicaba que «la propuesta debe ir acompañada de actuaciones que resuelvan las necesidades de aparcamiento».

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