Un nostálgico vermutín liberador a ritmo de lluvia

Un vermutín más nostálgico que otras veces. No solo por la variable lluvia que acompañó a la cita semanal, sino también porque muchos no pudieron evitar esa envidia sana hacia los padres que paseaban por la calle con sus hijos. Les miraban con caras de deseo por poder darse ellos también un respiro.

Como Christian Rodil, residente de la calle La Merced, que se encarga de poner la música para todos sus vecinos los domingos al mediodía. Ayer, micrófono en mano, saludaba a las familias que pasaban por el barrio: «Hola gente, qué suerte tenéis de poder salir, sois afortunados», les decía.

A medida que pasaban los minutos el sol se iba abriendo paso entre las nubes. Tal vez tuviesen algo que ver las canciones del repertorio que, como en cada 'Vermutín Musical', ofrece la emisora Radio Kras, organizadora del mismo junto a la Federación de Asociaciones Vecinales (FAV).

En Contrueces, concretamente en la calle San Juan, los vecinos se disfrazaron de Freddie Mercury con una caracterización muy concreta: la de la ama de casa travestida del video de 'I want to break free' (quiero liberarme). La ambigüedad reivindicativa fue festiva y colorista.

Jorge Díez es uno de los organizadores de las animadas actividades de la calle San Juan. Lanzó a las redes sociales un vídeo en el que explica que su único objetivo es repartir felicidad a su barrio a la ciudad a través de la música que 'pincha': «Me gustaría que, si hay alguna persona a la que molesto con lo que hago, me lo haga saber», detalló. Sin embargo, lo que recibió fue una respuesta más que positiva por parte de la gente, que le llegan a decir que su iniciativa es «medicina contra el coronavirus».

En el Grupo la Tejerona, de Ceares, ayer se armó una buena. Los vecinos organizaron la mismísima Feria de Abril con banderines, toquillas y flores adornando las ventanas y balcones. «Una chica pidió por internet farolillos, pero no llegaron a tiempo», dijo la presidenta de la Asoiación de Vecinos La Cruz de Ceares, Pilar Ruiloba. Y también los de la calle Ecuador, de La Calzada, trajeron el sur al norte.