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E. RODRÍGUEZ
GIJÓN.
Miércoles, 2 de enero 2019, 04:35
Papá Noel le había traído muchos regalos y estaba feliz. Pero Thiago Leonel era, de por sí, alegría pura. Por su simpatía, por su 'hola' y 'gracias' a cuantos le rodeaban, se ganaba el cariño de todos. «Tenía muchos amigos y era un niño muy ... conocido en el barrio». Le encantaban las motos. Tanto, que llegó a dormir en su cama abrazado a un casco que le había dejado un primo. También era fan de Spiderman. Su pijama con el hombre araña y una careta recién comprada revelan la adoración que sentía por este héroe del cómic.
Le gustaban muchas cosas. La música y bailar y que quedara constancia en las fotos y en los vídeos de móvil. Los cumpleaños y las velas en las magdalenas... «Era un ser de luz», dice su madre. Tras el paso por la guardería Hipo, en La Calzada, empezó primero de Infantil en La Atalía en septiembre. Su director, Mikel de la Torre, expresó ayer la honda pena del centro. «Estamos muy afectados. He podido hablar con los profesores que le daban clase para ofrecer nuestro apoyo en lo que podamos».
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