Moriyón defiende los avances logrados en política social e inversión frente a las críticas de «incapacidad» de la oposición

Durante su primera intervención la alcaldesa remarcó la importancia que han tenido el «diálogo, el consenso y el pacto, en un tiempo de peligrosa inestabilidad política» para aprobar «grandes proyectos» como el Plan General de Ordenación y el plan de vías, en los que agradeció el apoyo del resto de grupos de la Corporación. Y tras desgranar datos relacionados con la reducción del desempleo «en un entorno hostil como es el conjunto de Asturias» o el impulso que se ha dado a la actividad económica a través de la oferta de más espacios para la implantación de empresas o las facilidades de financiación a los emprendedores, remarcó que a lo largo del último mandato «el Ayuntamiento ha garantizado un mínimo vital digno para personas en situación de necesidad a través de una renta social de la que no nos arrepentimos, ha mantenido el pulso inversor y ha incrementado el valor neto del patrimonio municipal, rebajando la deuda y sin subir un céntimo los impuestos».

Muy diferente fue el análisis del portavoz socialista, José María Pérez, quien acusó a Moriyón de escudarse en culpas a otras administraciones cada vez que Gijón tiene que hacer frente a algún problema y criticó su capacidad de gestión señalando que «en ningún año han sido capaces de ejecutar más del 40% de las inversiones presupuestadas» y advirtiendo de las «herencias» que dejará a la Corporación que saldrá de las urnas en mayo de 2019, por compromisos que alcanzan los 500 millones de euros y que incluirían desde la aportación municipal del plan de vías hasta las actuaciones que vienen contempladas en los planes municipales de Movilidad y Accesibilidad, y especialmente las ayudas a la rehabilitación de fachadas aprobadas pero no abonadas, que cifró en 80 millones de euros (incluyendo los edificios que se benefician del Plan Especial del Muro y las intervenciones en barrios degradados).

El portavoz de Xixón Sí Puede, Mario Suárez, ejemplificó las «irresponsabilidades» del gobierno de Foro con tres fotografías: una de las colas que se formaron en los centros municipales el primer día del plazo para solicitar la renta social municipal, otra del «marronazo» de la playa de San Lorenzo «consecuencia de que arrastramos las mismas deficiencias en la red de saneamiento que ya había en 2011», y la tercera de una de las nubes de contaminación de la zona oeste. «No pueden esperar a que pasen los meses para que la papeleta le pase a otro», señaló en referencia a acciones que aún siguen en el aire como la aprobación definitiva del plan de Movilidad.

Pablo González, del PP, resumió los cuatro años del mandato como «una gran colección de oportunidades perdidas para todos los gijoneses por parte de quienes venían a renovar, a regenerar y a gestionar mejor, pero que al final se sintieron muy cómodos en el palacio que había dejado el anterior régimen socialista». Desde IU Aurelio Martín describió al equipo de Carmen Moriyón como «el gobierno del sí, pero no», enumerando varios «incumplimientos» relacionados con la renta social, las políticas de juventud, el edificio de Tabacalera o la reforma de las avenidas de Manuel Llaneza y Pablo Iglesias. Criticó además la negativa de Foro a incrementar los ingresos vía impuestos, en la que esta mañana se volvió a ratificar Moriyón. Para José Carlos Fernández Sarasola, de Ciudadanos, «Foro accdió al gobierno conun programa regenerador y de centro, pero hoy ya nadie sabe muy bien lo que defiende. Gijón no puede seguir sin rumbo. Necesita liderazgo, y eso implica decisión, firmeza, valentía y convencimiento, que es precisamente lo que le han faltado a Carmen Moriyón y a su gobierno».

El momento más tenso del debate se vivió después de que el portavoz socialista, José María Pérez, durante una protesta porque no se le permitía extender su primera intervención más allá del tiempo fijado, dijera que «al alcalde consorte sí se lo permite». La afirmación fue interpretada como una alusión por Mario Suárez del Fueyo, quien le exigió que retirara esas palabras. Ante su negativa, todo el grupo municipal de Xixón Sí Puede abandonó el salón de plenos durante el último turno de intervención de Pérez. Este manifestó su extrañeza y destacó que el portavoz de Xixón Sí Puede llegó a comparecer en una ocasión ante la prensa para presentar inversiones que competían al equipo de gobierno.

No faltaron alusiones, por otra parte, a los resultados de las elecciones de Andalucía de este fin de semana, y la entrada de Vox en su parlamento autonómico. La primera fue por parte de Aurelio Martín, durante un nuevo llamamiento a la unión de la izquierda municipal de cara al próximo mandato. «Sigo convencido de que cualquier gobierno de izquierdas es mejor que uno de derechas. Y espero que al nuevo ciclo político que en nada se abrirá en nuestra ciudad lleguemos con la lección aprendida y evitemos repetir los errores ya cometidos. Hay algo peor que un gobierno de derechas, y es uno en el que participe la ultraderecha xenófoba», apuntó el portavoz de IU. José María Pérez, por su parte, recordó que en 2015 Vox renunció a presentarse a las elecciones municipales en Gijón «y lo justificó en que quería apoyar la opción que representaba como candidata Carmen Moriyón».