Con una gran sonrisa lanzó Santos González a un grupo de estudiantes de ESO del IES Mata Jove de Gijón el reto de que levantara el brazo quien no tuviera teléfono móvil. Tal y como esperaba el catedrático emérito de la Universidad de Oviedo ... nadie alzó la mano, lo que le permitió situar a estos jóvenes, que abrieron este lunes las sesiones sobre matemáticas y ciberseguridad en el que van a partiparan más de 850 estudiantes de varios centros gijoneses, ante los retos y oportunidades de las tecnologías con las que conviven a diario. «Luego todos os movéis por el ciberspacio y hacerlo con seguridad es en lo que estamos empeñados», les dijo. Insistió Santos González en que aprovecharan estos talleres porque «es por donde va el futuro». «Hay miles de empleos que están sin cubrir en este campo», añadió.
Publicidad
A esta primera jornada de este proyecto promovido por el Grupo de Álgrebra, Codificación y Criptografía de la Universidad de Oviedo y la Cátedra de Ciberseguridad Castroalonso, en colaboración con el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), también acudió la vicealcaldesa de Gijón y concejala de Innovación, Ángela Pumariega, que destacó que con iniciativas de este tipo «queremos hacer de Gijón un referente en ciberseguridad», un campo que «va a suponer un nicho laboral de futuro muy importante».
Uno de los encargados de darles las claves a los jóvenes de 2.º de ESO que este lunes inauguraron este programa en Gijón fue Miguel Hernández, doctor en Ciberseguridad de la Universidad de Oviedo, que reconoce que «el principal objetivo es que los estudiantes tengan un acercamiento a aspectos de ciberseguridad y de cómo protegerse contra amenazas, empezando desde cómo generar contraseñas robustas, hasta tener técnicas y claves para poder protegernse por ejemplo de la divulgación de imágenes y cosas de estas».
Los jóvenes también reciben una aproximación histórica a la criptografía, con actividades sobre sistemas de cifrado utilizados a lo largo de la historia, como el ATBASH empleado por los hebreos en el 600 a. C., el tablero de Polibio, que debe su nombre al historiador griego que lo ideó hacia el año 150 a. C., el cifrado César del imperio romano, el disco de Alberti de la Edad Media o el cifrado Vigenère del Renacimiento. «Hacemos un repaso de las disitnas maneras en las que se cifraba la información a lo largo de la historia, desde la cinta espartana hasta los algoritmos actuales que utilizamos para que todo esté en canales de comunicación seguros», explica Hernández.
Publicidad
Sobre el nivel de conciencia que tienen los jóvenes de estas etapas educativas de la importancia de la ciberseguridad, este experto universitario asegura que «no son conscientes hasta que les mostramos lo hechos». «Ahí caen en la cuenta, por ejemplo, de que es vital tener una contraseña segura y, de hecho, tenemos un ejercicio en el que ellos mismos pueden verificar si sus claves son robustas o no», añade. «Se llevan una sorpresa, pero les damos un algortimo con el que pueden generar contraseñas seguras», comenta Miguel Hernández.
Los estudiantes que participan en esta formación, que se prolongará hast el mes de abril con un total de 18 sesiones en una decena de centros educativos gijoneses, también reciben nociones sobre legislación vinculada a la difusión de imágenes a terceros y su reenvío, así como las penas que acarrea este delito. Claves para detectar fraudes digitales con técnicas de 'phishing' y 'smishing' y para protegerse de las 'fake news' también forman parte de estas jornadas. «No son muy conscientes de estos peligros, pero cuando les explicamos que el correo electrónico tiene como fundamento las demás aplicaciones, como por ejemplo Instagram, pues ahí caen en cuenta que, pueden llevarles la cuenta de Instagram y suplantar la información», explica Hernández, que como ejemplo también ponen a los jóvenes ante «técnicas de inteligencia artificial de cómo generar perfiles falsos en las redes sociales». Al final, toda precaución es poca y aprender a protegerse es fundamental para estos estudiantes que no sueltan el móvil ni para comer el pincho en el recreo.
3 meses por solo 1€/mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.