Los análisis encargados por la Empresa Municipal de Aguas (EMA) a la empresa Envira descartan la contaminación por restos fecales en las muestras de sólidos y agua recogidos en la playa de San Lorenzo. De la composición concreta de lo analizado con el microscopio ... informará hoy al mediodía la alcaldesa, Carmen Moriyón, después de la reunión del Observatorio de la Playa. La regidora ya avanzó el pasado lunes que la primera impresión del equipo de gobierno, tras reunirse con representantes de la Policía Local, Bomberos y Emulsa, era que el fuerte olor a cloaca en San Lorenzo provenía de acumulaciones de grasa que se producen en las paredes de los colectores y que las fuertes lluvias arrastraron hasta el mar. Y que quedaba prácticamente descartado el que entre las desagradables manchas y espumas con que se toparon surfistas y usuarios del arenal hubiera heces procedentes de aguas residuales.
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La de este fin de semana fue la segunda crisis de este tipo a la que se enfrenta la regidora en lo que va de mandato. En septiembre de 2016, tras la aparición de una gran mancha en la zona de Peñarrubia que llevó incluso a cerrar la playa de La Ñora, Moriyón compareció junto al gerente de la EMA, Vidal Gago, y la directora del área municipal de Medio Ambiente, Clara González-Pedraz. En aquella ocasión la alcaldesa explicó que las muestras analizadas en el laboratorio por la EMA contenían una mezcla de espuma de mar con algas rojas y medusas. En la comparecencia de hoy, con parecida puesta en escena, los resultados también parece que refutarán el desastre ecológico que algunos grupos de la oposición vaticinaban y que llevaron al edil Esteban Aparicio a arremeter contra «los juicios precipitados» de algunos compañeros de Corporación a raíz de los malos olores en la playa. «Por querer erosionar al equipo de gobierno pueden acabar dando una patada en el culo de todos los gijoneses», advirtió el presidente de Emulsa, que llamó a la «tranquilidad» para que no se dañe la imagen del principal escaparate turístico de la ciudad.
Las palabras de Aparicio provocaron ayer una reacción en cadena entre los grupos de la oposición. El portavoz de IU, Aurelio Martín, juzgó sus declaraciones como «propias de la etapa predemocrática» y tirando de ironía pidió al edil de Seguridad Ciudadana que «se bañe en la playa a lo Fraga Iribarne en Palomares cuando aparezcan estas manchas». «Al turismo no les espanta quien denuncia lo que sucede, lo espanta lo que de hecho sucede en la costa de Gijón como consecuencia de la dejación de funciones de unas administraciones y la complicidad de otras», criticó.
El concejal de Xixón Sí Puede David Alonso replicó que «al señor Aparicio hay que recordarle que lo que daña la imagen de la ciudad es estar pendientes de una sanción europea y no tener la depuración de las aguas en la zona este». Desde el PSOE César González arremetió contra la «incapacidad de Foro», responsable de que un pozo de tormentas, el de Hermanos Castro, «que iba a estar en 2015 y ahora no entrará en funcionamiento como pronto hasta 2021».
El PP, por su parte, reclamó al gobierno local una relación de las fosas sépticas de la zona de Peñarrubia actualmente sin conexión a la red de saneamiento gijonesa. Ciudadanos señaló que «el problema real no es que la oposición denunciemos, sino que estos hechos se produzcan».
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