Marco Menéndez, Guillermo Maese y Chelo Tuya
Gijón
Martes, 27 de julio 2021, 02:36
«Las víctimas están firmes en su declaración. Están tranquilas y se sienten totalmente amparadas por el Principado y, también, por la sociedad». Así lo aseguró a EL COMERCIO Victoria Carbajal, una de las abogadas del centro de crisis para víctimas de agresiones sexuales. ... El pionero dispositivo que el Principado abrió en Oviedo tiene una plantilla dedicada «a estar a demanda de las víctimas, y es lo que hacemos en este caso», explica Carbajal, que se ha convertido en la abogada de referencia de las dos jóvenes que denuncian haber sufrido una violación grupal en Gijón.
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EUGENIA GARCÍA
Un caso en el que, asegura, «se están dando muchos datos inciertos. Por ejemplo, no es cierto que se conocieran por internet ni que hubiera ningún tipo de relación similar», aclaran. Ambas jóvenes acudieron ayer al juzgado a declarar «y lo hicieron de forma firme», reitera Carbajal, quien precisa que «si la jueza no hubiera visto indicios de delito, dos de los acusados no estarían ya ingresados en prisión a la espera de juicio».
La jueza sustituta en funciones de guardia en el Juzgado de Instrucción número 5 de los de Gijón dictó ayer un auto de prisión provisional comunicada y sin fianza para dos de los cuatro jóvenes portugueses, naturales de Braga, detenidos el pasado sábado como presuntos autores de un delito de agresión sexual contra dos amigas -una gijonesa y otra vasca-, en un piso de la calle del Carmen perteneciente al Hotel Albor. Los otros dos detenidos fueron puestos en libertad provisional, con medidas de alejamiento y prohibición de cualquier comunicación con las dos denunciantes. Según explicó su abogado defensor, Germán Inclán, los dos últimos podrán regresar a sus domicilios en Portugal, aunque deberán estar a disposición de la Justicia española.
El letrado indicó que presentará un recurso para que los dos jóvenes que han sido enviados a la cárcel asturiana puedan salir en libertad bajo fianza o, en su caso, continuar con su pena privativa de libertad en una cárcel lusa cercana a su domicilio.
El domingo declararon los acusados ante la jueza, mientras que el día antes las víctimas ya les habían reconocido fotográficamente en Comisaría. En la mañana de ayer fue el turno para que las agredidas prestaran declaración ante la jueza y para que los acusados escucharan las posturas de la Fiscalía y la acusación particular, que fueron idénticas.
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Por su lado, el letrado de la defensa solicitó la puesta en libertad de sus patrocinados, lo que solo consiguió para dos de ellos. De cualquier modo, los cuatro acusados tendrán que afrontar en su momento el correspondiente juicio. Los jóvenes portugueses fueron trasladados a las dependencias judiciales en dos furgones de la Policía Nacional poco antes de las nueve de la mañana y según el abogado Gerardo Inclán, «la defensa estima que los hechos no son constitutivos de delito en ningún caso. Las relaciones sexuales de diversa índole que tuvieron lugar entre estos chicos y las denunciantes fueron en todo momento consentidas y, por lo tanto, no son relevantes penalmente».
En el procedimiento consta un vídeo que fue grabado por uno de los jóvenes portugueses. El abogado defensor señaló que «se ve a las denunciantes practicando sexo con algunos de los acusados. Evidentemente, sin ningún tipo de violencia, intimidación o coacción. Nada de nada. Símplemente, lo están pasando bien». Esta prueba es una de a las que se agarra la defensa, ya que la considera «determinante de la inocencia de los cuatro».
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No obstante, la Fiscalía considera que los dos hombres ayer enviados al Centro Penitenciario de Asturias fueron «presuntos autores de los actos violentos», tal y como apuntaron las víctimas en sus declaraciones.
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Por otro lado, la defensa también remarca el informe realizado por los médicos que hicieron la exploración a las dos jóvenes. El letrado de la defensa es claro: «No existen las lesiones que las chicas refieren». Según explicó, en virtud de lo que aparece reflejado en el parte médico, «las únicas lesiones objetivas que refieren los médicos son, en uno de los casos, leve edema en los labios, lo cual puede ser simple y llanamente a fuerza de estar besándose toda la noche, como ellas mismas reconocen que estuvieron haciendo».
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En el segundo caso, según explicó, «tiene un enrojecimiento leve también en la zona de las ingles, lo cual también es compatible con una práctica sexual normal y corriente». Inclán quiso resaltar que «no hay ningún rastro de bofetadas o de golpes de ninguna clase». Es más, ahondó en que, «incluso ginecológicamente, los médicos han referido que no hay ningún tipo de lesión, lo cual creo que es fundamental en este tipo de delitos».
Ante esta situación, el abogado aseguró que «tengo que entender que la película que nos cuentan estas ciudadanas, de que las agredieron, las azotaron y las abofetearon no ha sido así. No es solo que lo nieguen los encausados, sino que los facultativos neutrales no objetivan ningún tipo de lesión de esa naturaleza».
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Por su lado, Loreto Rodríguez, abogada de las víctimas, aseguró que denunciará cualquier filtración sobre el caso y «cualquier vulneración de los derechos y la intimidad» de las dos chicas.
A última hora de la tarde, vehículos policiales trasladaron a los cuatro jóvenes del juzgado a la Comisaría.
Dos de ellos fueron puestos en libertad y sus familiares los recogieron para trasladarse a Portugal. En cuanto a los otros dos, fueron llevados a la cárcel asturiana en un furgón de la Guardia Civil.
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