Un incendio en un edificio de Gijón desata el pánico: todos los vecinos bajan en tromba a la calle

Varios moradores con problemas de movilidad reducida fueron desalojados con ayuda de otros vecinos. Cuando los efectivos del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios se personó en el lugar, apenas unos minutos después de ser alertados, prácticamente todos los vecinos estaban en la calle.

El incendio se había originado en los cartones del portal, supuestamente, y no ocasionó daños de alcance, aunque sí un tremendo sobresalto en el vecindario teniendo en cuenta la reciente desgracia de Valencia.

«No lo pensamos dos veces, en cuanto vimos el humo bajamos corriendo por la otra escalera y fuimos avisando a las puertas de los vecinos para que hicieran lo mismo», relataba José Manuel, residente en el edificio que desde hace meses está siendo objeto de obras en la fachada y en las zonas comunes.

Las recomendaciones por parte de los bomberos pasan porque los vecinos permanezcan en sus domicilios, colocando toallas mojadas por debajo de las puertas y esperando a que se ejecuten las excintión de las llamas, un trabajo que ayer se llevó acabo en apenas unos minutos. «Hay muchas más posibilidades de que pase algo grave si los vecinos intentan salir por sus propios medios que si permanecen en sus casas», explican los bomberos, preocupados por el efecto llamada de los desalojos del edificio incendiado en Valencia.