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Una semana después de dar a conocer que la Consejería de Salud había rescindido de forma unilateral el contrato para ejecutar la primera fase del proyecto de ampliación y reforma del Hospital Universitario de Cabueñes, cuyas obras se habían iniciado en el verano de ... 2022, Concepción Saavedra sigue dando explicaciones de por qué se adoptó una decisión que, repitió en varias ocasiones, era «inevitable» ante las pretensiones de la UTE de que se aprobara un sobrecoste de 44 millones de euros que, recordó, «es más de la mitad» del precio de licitación por el que fue adjudicada la obra. Lo ha hecho en la reunión del Consejo Social de Gijón que la alcaldesa, Carmen Moriyón, decidió convocar de forma urgente tras conocerse la paralización de los trabajos en Cabueñes. En ese marco, Saavedra ha insistido en que la intención de su departamento es redactar un nuevo proyecto, más completo y adaptado tanto a los tiempos como a las necesidades actuales del Área Sanitaria V, en el menor tiempo posible. Para ello, desveló, hoy mismo ha mantenido una reunión en Madrid, junto al viceconsejero de Política Sanitaria, Pablo García, con la empresa pública Tragsa, en la que le han planteado que asuma la redacción del nuevo proyecto. «Creemos que es una buena idea hacerles el encargo. Al ser un medio propio, los plazos van a ser menores. La de hoy ha sido la primera reunión con ellos. Ahora seguiremos en contacto para tramitar ese posible encargo», respondió a preguntas de EL COMERCIO. Se busca así ganar tiempo y que la licitación pública de la obra pueda adelantarse. La intención es que «podamos empezar nuevamente la obra a principios de 2026».
La consejera aclaró que los trámites administrativos para las rescisión del contrato con la UTE FCC-Los Álamos no interferirán en el trabajo que ya se está planificando para contar con un nuevo proyecto. «Probablemente la empresa emprenderá acciones judiciales, al igual que la Administración puede pedir daños y perjuicios porque hemos perdido un tiempo y nos sentimos perjudicados». En diciembre pasado, la Consejería de Salud ya se resolvió un expediente de penalidades a la UTE por 2,7 millones de euros por los retrasos en la ejecución de los trabajos.
Tal y como publicó EL COMERCIO, se está trabajando ya en el plan director que dará lugar al proyecto para transformar el centro de especialidades Avelino González de Pumarín en el futuro centro de salud de Nuevo Gijón-Perchera-La Braña, que se trasladaría al edificio contiguo a su actual emplazamiento en cuanto las consultas de Atención Especializada fueran acogidas en el edificio de la ampliación de Cabueñes. También se está valorando que el futuro hospital ampliado incorpore el hospital de día infantojuvenil de salud mental y servicios de salud mental, tal y como han solicitado el propio área, el ayuntamiento y los usuarios. La construcción de la nueva Facultad de Enfermería, que inicialmente quedaba relegada a la segunda fase del proyecto de ampliación y reforma de Cabueñes, es otra de las cuestiones que se va a adelantar para ganar tiempo. Según expresó la consejera de Salud, se está buscando ahora la mejor ubicación, en el entorno del hospital, con el objetivo de que sea una ubicación «definitiva».
En sus respectivos turnos de palabra, los representantes de las asociaciones vecinales de las zonas urbana y rural, de los sindicatos, de los consejos de discapacidad o de la mujer, de las asociaciones de consumidores y de los distintos grupos políticos le trasladaron el sentir general de «desilusión», «fiasco» o «palo gordo» que para los usuarios del Área V que tienen Cabueñes como hospital de referencia ha supuesto la noticia de la paralización de los trabajos. Buena parte lamentó la falta de control en las obras y la mayoría se quejó de la falta de transparencia e información sobre el discurrir del contrato en estos más de dos años de trabajos. De ahí que saliera a relucir la comisión de seguimiento del proyecto de ampliación de Cabueñes que se llegó a anunciar en los primeros compases de la obra y que nunca se llegó a constituir. Los miembros del Consejo Social, incluida la propia alcaldesa, consideran que su creación no se puede demorar más. La petición fue asumida por Concepción Saavedra: «Desde la consejería hay el compromiso de informar cada cierto tiempo, de tres o cuatro meses, cuando haya algo que contar de cómo evoluciona. Buscaremos la mejor fórmula para informar de este y otros proyectos que estamos realizando en Gijón, como el consultorio de Nuevo Roces o la extensión de los centros de alta resolución de urgencias en Atención Primaria», afirmó.
El objetivo de la consejería, insistió en un par de ocasiones Saavedra, es que «tengamos cuanto antes» el nuevo Hospital de Cabueñes, con un proyecto que además de incluir lo no ejecutado en estos meses incorpore mejoras tecnológicas (se refirió a domótica, robótica e inteligencia artificial), contemple espacios polivalentes «que nos permiten ajustarnos a las necesidades de cada momento» y dobles circuitos (cuya necesidad quedó en evidencia durante la pandemia de la covid) y que dé respuesta a las necesidades señaladas por la gerencia del Área V. También que incluya los denominados 'espacios grises', que no estaban contemplados en esta primera fase: las zonas de laboratorio, esterilización, farmacia y hemodiálisis.
La apostilla la puso Tita Caravera, presidenta de la asociación vecinal de La Arena, al recordar lo mucho que se ha alargado en el tiempo otro proyecto de ciudad: «Espero que la ampliación del Hospital de Cabueñes no se convierta en el nuevo plan de vías».
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