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PABLO SUÁREZ
GIJÓN.
Martes, 26 de noviembre 2019, 00:42
Ya no hay dudas, sino cifras cerradas. Concretamente 1.350.000 euros exactos. Es la cantidad que supondrá para el Real Grupo de Cultura Covadonga la adquisición, de forma firme y rotunda, de la finca La Torriente. Tras casi 22 meses de negociaciones ... y versiones encontradas, ha sido comisión mixta compuesta por la Agencia Tributaria (AEAT) y los servicios tributarios del Principado la que ha tomado la última decisión, considerando que el precio final de la parcela debe mantenerse en aquel que los propios socios del club habían acordado en asamblea.
La misma cantidad defendida durante todo este tiempo por la junta directiva de la entidad. «Este fue el compromiso adquirido cuando se hicieron públicos los detalles económicos de la compra», manifestaba ayer el presidente del Grupo Covadonga, Antonio Corripio, quien agradecía en un comunicado interno «la confianza mostrada por los socios al aprobar la adquisición de la finca», así como el «gran apoyo» recibido en las encuestas llevadas a cabo meses atrás y que orientarán el uso futuro del terreno.
Pese a que la resolución no convence en continente a la entidad grupista, al determinar que la operación no está sujeta a IVA, sí lo hace en contenido, manteniendo el precio fijado y considerado «inamovible» para la directiva, que en ningún momento sopesó la opción de pagar más de lo aprobado en asamblea.
«Siempre hemos dicho, con convencimiento, que ese precio ya incluía el IVA», explicó Corripio, quien, no obstante, descarta emprender nuevas acciones legales y da por cerrado el tema. «Aunque entendemos que la operación debería estar sujeta a IVA, hemos decidido no presentar un recurso para no incurrir en nuevos gastos derivados de un proceso judicial y, sobre todo, porque aún en el caso de ganarlo, el precio final de la compra sería el mismo», abundó, consciente de que el club ha ganado todo lo que podía ganar dentro de esta situación confusa en la que ha derivado la compra de la finca, cuyos usos futuros serán aquellos marcados por el futuro plan director de la entidad.
Más allá del valor material de la nueva parcela, clave para materializar la expansión que planea el club, acorde con su masa social, la resolución de la comisión mixta refuerza también la figura de la junta directiva, que siempre descartó un nuevo desembolso por el terreno. De hecho, fueron varios los socios que en la última asamblea cuestionaron la gestión realizada en relación a esta adquisición, una posición que queda ahora sin argumentario. «Estamos contentos porque se cumple la palabra que le dimos a los socios. Esta junta directiva cumple», resumió el presidente grupista.
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