Gijón ultima un «amplio dispositivo» para acoger a medio millón de personas en las calles

Hoy se celebrará una reunión de coordinación entre los distintos cuerpos de cara al diseño de un despliegue policial que se prevé «amplio y notorio» y que por parte del Cuerpo Nacional de Policía incluirá la llegada de efectivos procedentes de otros puntos de Asturias e incluso apoyo con un helicóptero desde el aire. Los técnicos de seguridad trabajan sobre la previsión de que confluyan en la ciudad hasta medio millón de personas y el objetivo es que «todo sea fluido y sin altercados».

Junto al control de posibles aglomeraciones aún en plena pandemia, una cuestión clave, competencia de la Policía Local, será la regulación del tráfico. Al habitual de la ciudad se suma el de los miles de turistas alojados en Gijón y el de quienes asistan a los grandes eventos que coinciden en domingo en un mismo entorno. Ayer, ya sin ellos, en los aparcamientos del centro lucía el cartel de completo y calles como Anselmo Solar vivieron durante toda la tarde continuas retenciones en la salida hacia la ronda. «Hemos reforzado el transporte público, justamente para evitar los desplazamientos en transporte privado que pueden congestionar o incomodar más a todo el mundo», apuntaba la alcaldesa, quien puntualizaba no obstante que «aunque confluyen muchas actividades en un día, como casi todos los años, son en lugares distintos y con horarios distintos».

Los grupos de la oposición hacían ayer hincapié en lo que consideran «un colapso anunciado» y aseguraban echar en falta medidas para evitarlo. «Debería de haber más aparcamientos disuasorios gratuitos, cambios en EMTUSA para tener autobuses lanzadera e información para instar a la gente a que no entren al centro salvo necesidad o acceso a un parking», apuntaba José Carlos Fernández, Sarasola, de Ciudadanos, Algo similar señalaba Rufino Fernández, de Podemos-Equo, quien lamentaba que «no se haya puesto en marcha una campaña para fomentar el uso del transporte público», si bien puntualizaba que «será algo puntual y pasajero».

Pelayo Barcia, de Foro, cree que el despliegue policial «es un reconocimiento del caos creado por sus medidas de movilidad» y criticaba que «lo que no hemos gastado en festejos tendremos que gastarlo en horas extras de policía». Alberto López-Asenjo, del PP, teme que «la guerra al coche vaya a provocar un efecto ratonera». Y Eladio de la Concha, de Vox, cree que «el caos circulatorio no es fruto de un error, sino una decisión político-ideológica».

«Ojalá tuviésemos muchos fines de semana así durante todo el año», añadió por su parte el presidente de Otea Gijón, Ángel Lorenzo, quien recordó que la presencia de tantos visitantes en Gijón «genera empleo».